SIMBOLOS TATTWAS

PARA VENCER DIFICULTADES

¿LE CUESTA TOMAR DECISIONES? ¿SE RELACIONA MAL CON LOS DEMÁS? MEDITAR CON LOS SÍMBOLOS TATTWAS PUEDE AYUDARLO A SUPERAR SUS LIMITACIONES PERSONALES.

C ada persona tiene una serie de defectos que complican su desempeño en la vida cotidiana. Tal vez, se trata de un problema de timidez, de baja autoestima, o de una falta de contacto con la realidad.

También, puede suceder que la persona no se sienta con fuerzas suficientes como para enfrentar desafíos, que tenga miedo de todo o que le cueste mucho comunicarse con los demás. Las dificultades personales pueden ser varias, pero hay una forma de vencerlas.

A través de la magia de los amuletos tattwas usted podrá superar sus limitaciones y compensar su personalidad con los atributos que le faltan.

¿QUÉ SON LOS TATTWAS?

Los tattwas básicos son cinco arquetipos o símbolos, descubiertos en la India hace cientos de años. Encarnan el poder de los elementos y ofrecen puntos de entrada a los reinos elementales. La palabra tattwa es indostana y literalmente significa “elemento”.

Su uso como herramienta mágica se difundió a través del Asia central y oriental. En la actualidad se observan estos símbolos en muchos templos tibetanos.

Nuestros arquetipos viven en los mundos elementales y tienen mucho que enseñarnos si los dejamos hacerlo.

La belleza de los tattwas está en sus formas y colores. Los cinco principales simbolizan a los cuatro elementos, más un quinto: el espíritu.

SÍNTOMAS DE CARENCIAS ENERGÉTICAS

Hay muchas maneras de descubrir carencias de un elemento en la personalidad. Una de ellas es solicitar una carta astral. Pero, también, puede ayudarnos el conocer qué problemas se generan a raíz de la carencia de un elemento en particular.

A continuación, una guía de síntomas para que usted pueda identificar qué elemento le falta y lo compense por medio de la visualización del tattwa correspondiente.

CARENCIA DEL ELEMENTO TIERRA

Sensación de estar fuera del contacto con la realidad. Inseguridad. Energías dispersas. Angustia. Falta de conexión con los demás y con el espacio.

CARENCIA DEL ELEMENTO AGUA

Estar siempre distanciado de los demás en el aspecto emocional. Falta de compasión, problemas de relación crónicos. Estallidos de cólera. Poca habilidad intuitiva. Pérdida o falta de aptitudes psíquicas rudimentarias.

CARENCIA DEL ELEMENTO FUEGO

Pérdida o falta de impulso sexual, incapacidad para sentir entusiasmo por algo, traición intencionada de la confianza de los demás, niveles de energía crónicamente bajos, incapacidad para ver los proyectos terminados. Fatiga crónica sin causas médicas que la justifiquen, depresión.

CARENCIA DEL ELEMENTO AIRE

Incapacidad para centrarse o concentrarse, calificaciones bajas en los estudios. Repetidos problemas molestos con la salud. Pérdida o falta de aptitudes para la comunicación. Incapacidad para iniciar proyectos.

Nota. El quinto elemento es el Espíritu. Está en los cuatro elementos y se compone de todos ellos. Los trasciende. Es la fuerza unificadora que los une y anima, dándoles vida y permitiéndoles comunicarse y trabajar juntos.

CÓMO CONECTARSE CON LOS SÍMBOLOS

Dedique una semana a examinar los símbolos diariamente, en especial justo antes de irse a dormir (entre 5 y 10 minutos deberían bastar). No tiene que mirarlos fijamente o pensar en algo en particular mientras los observa. Ellos grabarán su mensaje en su subconsciente. Su mente profunda sabe qué son y se requiere este período de conocimiento para ayudarlo a beneficiarse plenamente de su uso.

No es necesario que infunda su energía a los símbolos, como debe hacerse con la mayoría de las herramientas mágicas. La diferencia entre la mayoría de los demás herramientas mágicas y las imágenes de los tattwas es que estos símbolos no actúan como una extensión de usted mismo o de su voluntad y, por consiguiente, no tiene que “dotarlos de poder”.

Cuando se sienta preparado, puede empezar a explorar directamente los reinos elementales.

MEDITACIÓN TATTWA

Una vez que logró identificar la carencia de un elemento, elija el símbolo que le corresponde para meditar con él. En una habitación tranquila, sentado o acostado en el piso, coloque a la altura de la vista, frente a usted, la imagen del tattwa que haya elegido. Haga unas respiraciones profundas y comience a relajar su cuerpo y serenar su mente llevándola hacia los niveles receptivos.

Mientras continúa contemplando el tattwa, cierre los ojos el tiempo suficiente para dar al símbolo un resplandor brumoso. Céntrese en mirar dentro del tattwa, más que en contemplarlo. Evite mirarlo fijamente, pues sólo conseguirá cansancio visual. No tema parpadear.

Al cabo de varios minutos puede empezar a advertir un halo de color alrededor del contorno del tattwa. Ese halo es la imagen invertida del color de la imagen reflejándose desde su retina e indica que ha mirado el símbolo el tiempo suficiente. El color que ve será el mismo que vería en un negativo en color si hubiese tomado una fotografía del tattwa. Esta imagen invertida sigue aproximadamente la paleta de colores de un artista; cada color tiene su opuesto. En términos de sus tattwas, estos opuestos son:

MÉTODO DE ACCESO: DESCORRIENDO EL VELO

Mantenga la imagen invertida tan inmóvil como le sea posible. Considérela como un portal entre los mundos. Así, llegará a resultarle accesible. Cuando haga esto, visualice parte del símbolo volviéndose mas delgado y convirtiéndose en una gran cortina. Mentalmente, acérquese a la cortina, aparte ese velo y entre en el tattwa. Después de entrar, asegúrese de cerrarlo detrás de usted y visualícelo volviendo a su densidad anterior.

Es habitual y prudente salir por el mismo camino. Vuelva a través del mismo tattwa. Visualice la cortina reapareciendo, antes de deslizarse por ella. Una vez que esté del otro lado, visualice el tattwa disipándose hasta que esté flotando solo en la nada. Piense en su cuerpo, recordando la sensación de ser corpóreo y vuelva a él lentamente. Abra los ojos y mire nuevamente el tattwa que cuelga delante, visualizando el cierre de las puertas que ha abierto.

Esta meditación le permitirá incorporar las cualidades que le faltan. Puede