ALTA MAGIA CON FUEGO
HACER IMÁGENES CON LAS LUCES DE LAS VELAS DURANTE UN CONJURO ES UNA TÉCNICA MUY ANTIGUA QUE SIRVE PARA REFORZAR PEDIDOS Y OBTENER MAYOR EFICACIA EN LAS CEREMONIAS RITUALES. AQUÍ, UNA SERIE DE DIBUJOS CON VELAS CARGADOS DE LA PODEROSA ENERGÍA TRANSFORMADORA QUE SÓLO OTORGA EL FUEGO.
Las velas son un instrumento muy utilizado en todo tipo de creencias y, por supuesto, también en las prácticas mágicas.
Desde la Antigüedad, se han usado como medio de iluminación, así como elemento primordial en casi todas las ceremonias de cultos rituales de todas las religiones, tanto en Oriente como en Occidente.
Como la llama de la vela representa al elemento Fuego, carga con los significados que éste representa: símbolo de vida, de energía en movimiento y de las fuerzas mágicas que componen la naturaleza, cuyo poder puede ser utilizado por el mago para conseguir sus objetivos.
Su uso ritual está destinado a producir cambios drásticos en la existencia, debido a que, alquímicamente, se considera que este elemento es producto de la transformación de la materia en energía y produce, por tanto, los mismos efectos. Su función primordial, en este aspecto es la de actuar como un elemento purificador, pues “quema” por completo la negatividad que esté afectando a la persona.
Un aspecto poco difundido y aprovechado es el de la distribución estratégica de las velas, y éste es el tema que vamos a desarrollar en esta nota. El objetivo es que nuestros lectores puedan perfeccionar su trabajo mágico y potenciar hechizos.
LUGARES ESTRATÉGICOS
Muchos brujos y hechiceras suelen usar una vela para marcar cada cuadrante del círculo ritual. Éstas pueden ser de un color específico asociado a cada elemento, o todas del mismo color (generalmente, uno neutro).
Usualmente, de implementarse esta metodología, se van a ir prendiendo durante el llamado a cada cuadrante.
Los colores atribuidos a cada elemento varían según las tradiciones, una muy difundida es la que sigue:
■ ESTE-AIRE: amarillo o celeste SUR-FUEGO: rojo
■ OESTE-AGUA: azul, turquesa
■
NORTE-TIERRA: negro, verde,
■ marrón.
Otra distribución clásica con velas consiste en colocar dos en el altar, una negra a la izquierda y otra blanca, a la derecha, puestas en cada esquina del espacio ritual.
Su función es iluminar el sitio ceremonial por excelencia, que es el altar, y protegernos. Es, por esta razón, que son las primeras en encenderse y las últimas en apagarse, como símbolo del comienzo y el final de la ceremonia ritual.
Respecto a los colores, el negro limpia y el blanco simboliza la pureza del acto mágico que se realizará; ambos representan, también, la conexión entre el espíritu y el objetivo mágico que se persigue.
En los altares para ofrendar a deidades, suele armarse un camino ascendente de velas hasta la imagen del dios, representando la “elevación” del espíritu, que va desde el mundo terreno al celestial.
Esto se logra colocando bajo una tela cubos de distintas alturas, que harán de peldaños para las velas.
MAPAS DE LUZ
Tomando en cuenta que las velas son elementos que ayudan a invocar la vibración ígnea del elemento Fuego, al igual que ciertas ceremonias que se efectúan aprovechando la energía del Sol, la vela es un receptor y fijador de nuestro pedido que, luego de encendida, expande y transmite nuestra solicitud al cosmos para llegar al punto deseado por el operador.
Podemos potenciar este poder utilizando varias velas distribuidas simbólicamente en el altar. La única, pero importantísima advertencia sobre esta modalidad de trabajo, es la de extremar medidas de seguridad para prevenir incendios. A tal fin, se debe evitar colocar las velas cerca papeles y ofrendas.
Velas pequeñas y grandes
El uso de velitas chatas y pequeñas es lo más aconsejable para este tipo de trabajo, debido a varias razones prácticas: son menos costosas, más fáciles de manipular para organizarlas en el altar y más seguras, pues no pueden voltearse y caer; además, vienen en pequeños recipientes de aluminio. Se consiguen en varios colores, por lo que este punto no es una limitante.
De todos modos, quienes deseen trabajar con velas altas,
LOS MAPAS DE LUZ PUEDEN HACERSE CON CUALQUIER TIPO DE VELAS. LO MÁS IMPORTANTE ES NO OLVIDARSE DE QUE EL COLOR ELEGIDO HA DE SER ADECUADO AL TIPO DE RITUAL QUE SE DESEA HACER.
pueden hacerlo, el efecto visual es majestuoso. A tal fin, recomendamos usar las gruesas tipo cirio, que son más estables y no pueden voltearse.
Dibujos con velas, su simbolismo
La propuesta es elegir un símbolo esotérico acorde a la finalidad del ritual, o de la función que desee que cumpla, y trazar su recorrido haciendo puntos con una tiza sobre la mesa del altar.
■ Una vez que tenga la guía dibujada y estén el resto de los elementos rituales en su lugar, se procede a colocar de izquierda a derecha, siguiendo el recorrido simbólico, varias velas seguidas, una detrás de otra.
■ El espacio entre ellas queda a elección del operador. Algunos brujos ponen una en cada vértice, si los hay; y, si se trata de una figura curva, arman una línea de velas equidistantes sobre el trazo.
■ Luego, las velas se encienden de izquierda a derecha, siguiendo el recorrido del mapa simbólico y se apagan, al finalizar, haciendo el mismo recorrido pero a la inversa; es decir, de derecha a izquierda.
Recordamos a nuestros lectores que las velas se encienden con una cerilla de madera o alguna ramita prendida.
Asimismo, nunca deben apagarse soplando o comprimiendo la mecha con los dedos, sino hacerlo con un apagador de velas de metal, que, actualmente, se consiguen sin problemas en comercios (suelen ser de bronce). Mientras no dispongamos de un apagador, podemos utilizar un pequeño vaso, o copa de cristal o metal, pero acuérdense de que jamás se apagan soplando, sino con una tapita de metal o mata-vela, como le dicen.
RECORRIDOS SIMBÓLICOS
A continuación, hemos elegido diversos símbolos universales para que usted los convierta en auténticos dibujos de luz, y explicamos en cada caso el uso mágico que puede darles.
Recuerde que puede potenciar su efecto eligiendo velas del color más adecuado al objetivo que persiga (vea el recuadro de la pág. 15).
Aconsejamos comenzar a trabajar con los símbolos básicos y, luego, a medida que se acostumbre a manipular varias velas, vaya avanzando hacia figuras más complejas.
Formas básicas
Bajo este apartado, consideraremos las formas geométricas más sencillas, pero no por eso menos poderosas; dado que, por el contrario, son las más potentes desde el punto de vista simbólico por su simplicidad, antigüedad y universalidad.
Círculo: es uno de los símbolos ocultistas más poderosos. Representa el infinito, la eternidad, la unidad, el universo, el sol, el cielo y la perfección. Inscripto en la mayor parte de los talismanes, el círculo permite contener y concentrar la energía mágica necesaria para invocar poderes espirituales.
Usos: un recorrido luminoso circular levantará con extrema claridad una barrera entre el
LA UNCIÓN Y CONSAGRACIÓN
LA PERSONA QUE HACE EL RITUAL DEBE CONSAGRAR Y UNGIR LAS VELAS CON SUS PROPIAS MANOS.
PARA HACER LA UNCIÓN, SE PUEDE UTILIZAR, COMO NORMA GENERAL, EL ACEITE DE OLIVA DE PRIMERA PRENSADA; PERO, TAMBIÉN, EXISTEN ACEITES ESENCIALES PREPARADOS PARA FINES ESPECÍFICOS (SE LOS COMPRA EN TIENDAS ESOTÉRICAS).
A FIN DE UNGIR Y CONSAGRAR LAS VELAS, SE DEBE TENER EN CUENTA QUE EL NORTE ESTÁ EN LA MECHA Y EL SUR, EN EL PIE; POR TANTO, SI LA CUESTIÓN ES DE TIPO NEUTRO Y NO SE TRATA DE MEJORAR O AMINORAR, UNGIREMOS CON EL ACEITE DESDE LA MITAD DE LA VELA HACIA ARRIBA (NUNCA RETORNAR, IR SIEMPRE HACIA ARRIBA), Y, DESPUÉS, HAREMOS LA MISMA OPERACIÓN DESDE LA MITAD INFERIOR, EN SENTIDO CONTRARIO, ES DECIR, YENDO HACIA ABAJO.
CUANDO SE TRATE DE AUMENTAR O MEJORAR ALGO, O PARA QUE NOS FAVOREZCA ALGUNA COSA POSITIVA, ESCRIBIREMOS LOS NOMBRES Y APELLIDOS O LA PETICIÓN SOBRE LA VELA USANDO UN PUNZÓN O BOLÍGRAFO, YENDO DESDE EL NORTE AL SUR (SIEMPRE SIN RETORNO). POR EL CONTRARIO, PARA AMINORAR O REBAJAR ALGO, O ELIMINARLO, LO HAREMOS EN SENTIDO INVERSO, DE ABAJO HACIA ARRIBA.
MIENTRAS SE UNGE, SE CONSAGRA LA VELA A LA ENTIDAD PROTECTORA ELEGIDA. brujo, su trabajo y las fuerzas externas que se quieran alejar (espíritus malignos, influencias negativas de otras personas, entidades elementales peligrosas, etcétera).
Triángulo: el equilátero
(tres lados iguales) es el que recomendamos usar por su perfección. Con esta figura geométrica, representamos la creación y el desarrollo de la vida. Encarnación del número tres, el triángulo simboliza el cuerpo, el alma y el espíritu; el pasado, el presente y el futuro; así como la sabiduría, el amor y la verdad. En la doctrina cristiana, es el símbolo la Santísima Trinidad (Padre, Hijo y Espíritu Santo).
Usos: armonizar la mente, el cuerpo y el espíritu, realizar rituales de protección contra las fuerzas del mal que puedan atacar alguno de los tres aspectos anteriores.
Cuadrado: representa a los cuatro elementos, los cuatro puntos cardinales y es imagen de la totalidad. Nos conecta con lo terrenal y como creación hu-mana, simboliza, también, el esfuerzo del hombre por trascender el mundo de la materia. Junto con la cruz, alude al esfuerzo por liberar al hombre. Usos: esta forma es adecuada para fortalecer el espíritu, hacer exorcismos, encaminar positivamente un asunto, rituales relacionados con la vivienda, la prosperidad y asuntos legales.
Figuras protectoras
Las siguientes son figuras algo más complejas, que se usan específicamente para resguardar un sentimiento, emoción, elemento, objeto o persona, de cualquier daño.
Cruz celta: la cruz en un círculo representa los cuatro elementos, unidos a un quinto, de carácter espiritual. También, simboliza la rueda del sol y la rueda medicinal de los chamanes. Ella arroja luz y sabiduría donde hay oscuridad o confusión. Dentro de cada cuadrante, uno puede escribir el nombre de la persona que quiere resguardar. Usos: rituales de salud, protección contra enfermedades mentales y espirituales, limpiezas en general.
El corazón: no sólo alude a lo pasional, sino, también, a otros tipos de amor como el humanista. Es un contenedor de nuestras emociones, y es importante que sea entero y armónico. También puede colocar en su interior el nombre de la persona amada.
Usos: rituales de amor, arrojar luz en asuntos del corazón, limpiar heridas sentimentales.
Herradura invertida: es un símbolo ancestral para alejar a la mala suerte y atraer la buena fortuna. El espacio energético que se genera dentro de la
“U” es ideal para posicionar