Pelea entre expertos de Caravaggio
El entuerto se originó porque en 2006 Sotheby’s vendió una obra atribuyéndola a un artista anónimo seguidor de Caravaggio. La catalogó como Los jugadores de cartas, una copia del siglo XVII del original de Caravaggio que está en el Museo de Arte Kimbell ( Texas). La obra, que pertenecía a Lancelot William Thwaytes, fue vendida en 65 mil dólares a Denis Mahon, hombre con historia en identificar Caravaggios. Amarga sorpresa para Thwaytes cuando se enteró que la pintura tenía una licencia de exportación por 15 millones de dólares ( y un valor estimado que supera los 100 millones de dólares). No dudó. Inició juicio: acusa a la famosa casa de remates londinense de no haber estudiado exhaustivamente la obra. Está claro que Sotheby’s no se guardó un as en la manga: perdió una comisión millonaria. Los expertos de las partes son pesos pesados. Richard Spear, contratado por Sotheby’s, sostiene que no se puede asegurar que la obra es de Caravaggio ya que no está firmada. Sebastian Schütze, profesor en la Universidad de Viena, afirma que “la calidad de la obra sugiere que no se trata de un original”. Thwaytes tiene también expertos reconocidos de su lado: Mina Gregori, Maurizio Marini; Antonio Paolucci, director del Museo de Vaticano y sigue la lista. El Juez tendrá que vérselas con una encrucijada acaso irresoluble.