Australia, tierra del nuevo refugio
Mi nombre es Mohammad Al-Khafaji y he visto de primera mano el poder de bienvenida cuando llegué a Australia en 2003 como refugiado desde Irak.
Hoy soy un australiano orgulloso y agradecido por las oportunidades que he tenido creciendo en mi nuevo país de adopción y soy el CEO de una organización sin fines de lucro llamada Welcome to Australia. Nuestro objetivo es cultivar una cultura de acogida hacia los refugiados y los nuevos emigrantes en Australia.
Australia es vista como una nación multicultural exitosa. Según el último censo, el 49% de los australianos nacieron en el extranjero o tuvieron un padre nacido en el extranjero y hay más de 300 idiomas hablados en hogares australianos. Si bien hay elementos de racismo en Australia, en su conjunto somos una sociedad que acepta y cohesiona. El éxito del multiculturalismo de Australia no ocurrió por accidente. Gobiernos sucesivos han hecho un esfuerzo consciente por reconocer la importancia de la diversidad cultural para nuestra sociedad. Tenemos leyes que protegen contra la discriminación racial, y tenemos programas positivos que animan a todos a pertenecer y sentirse parte. El objetivo es unir a los australianos en lugar de hacer una distinción basada en raza, religión o etnia.
Nuevas oleadas de migrantes y refugiados a Australia han traído nuevas ideas, innovación y un sentido de resiliencia a nuestro país que han enriquecido nuestra sociedad. Diversas investigaciones también han demostrado que los refugiados son los más emprendedores entre los migrantes y ya han devuelto a la comunidad mediante la creación de empresas y puestos de trabajo, y también contribuir a la sociedad a través del voluntariado. Sabemos que al dar la bienvenida a la gente y crear una cultura de pertenencia, los refugiados y los migrantes prosperan y devuelven a la comunidad de múltiples maneras.
El temor y la división globales han llegado a Australia hasta cierto punto, y Welcome to Australia existe para tratar de contrarrestar esto, para traer de vuelta la conversación a uno de unidad, igualdad y oportunidades para todos. Cambiamos la conversación facilitando las conversaciones entre australianos establecidos y nuevos inmigrantes y compartiendo historias positivas de los refugiados que están haciendo grandes cosas. Cuando la gente escucha las historias de los demás, rápidamente se dan cuenta de que todos tienen las mismas esperanzas y sueños y se dan cuenta de que tenemos más en común que lo que nos divide. La Argentina, como Australia, es un país de inmigrantes y refugiados, y ambos reconocen la riqueza que han recibido de su historia de inmigración.