Revista Ñ

Invierno porteño, con música y baile. Sobre Tango BA

Tango BA festejará una nueva edición con un homenaje especial al genial compositor y bandoneoni­sta.

- N.P.

Las efemérides no siempre son tablitas y guías de almanaque a las que el periodismo recurre para redundar, una vez más, en el pasado. Que en 2017 se cumplan cien años de la fundación simbólica del tango (en 1917 Firpo estrenó “La cumparsita”, el más célebre tango, y Gardel por su parte registró para Odeón el primer tango-canción, “Mi noche triste”), así como 25 años de la despedida de Astor Piazzolla, su refundador, es una señal concreta. Por caso, que lo clásico, lo moderno y lo contemporá­neo tensan y aflojan opuestos estilístic­os y que en esa variedad el que gana es el público. Y la gran cita internacio­nal (como lo es desde 2009) vuelve a ser Tango Buenos Aires, Festival y Mundial, organizado por el Ministerio de Cultura de la ciudad, del 10 al 23 de agosto en 32 sedes.

Entre los cientos de conciertos y competidor­es de baile de todos los países en más de una treintena de sedes, cabe destacar celebracio­nes y homenajes: la orquesta de Osvaldo Piro a los 80 años de la Orquesta de Aníbal Troilo, los 55 años de carrera de Amelita Baltar o los 50 años de música del guitarrist­a Juanjo Domínguez. “Miradas de Mujer” es una nueva sección destinada a artistas que abran nuevos caminos en la expresión tanguera. Y hay también una muestra que promete, dedicada a Alberto Castillo. Y porque no todos bailamos, pero es imposible no mover los pies al son de las versiones de “Así se baila el tango” y “Siga el baile” que nos dejó el swing irresistib­le de “El cantor del pueblo”, nadie debería perderse los días 22 y 23 el combate final entre las mejores parejas del Mundial de Baile. ¿Dónde? En el Luna Park, por supuesto. El Festival también tendrá estrenos como Morir y vivir en Buenos Aires, una obra musical inspirada en Astor Piazzolla y Horacio Ferrer. Ñ conversó con su directora, autora e intérprete, Ana María Fontán.

–¿Con qué se van a encontrar los que concurran a ver Morir y vivir en Buenos Aires?

–Es un unipersona­l en el que vengo trabajando hace 17 años, con músicos en vivo y junto a Julián Vat (Director Mu- sical de la Fundación Piazzolla) que conoce al detalle el material y sus arreglos originales. Yo estoy en escena y los personajes se articulan en el relato a través de proyeccion­es audiovisua­les, animacione­s y voces en off. Hay bastante material de María de Buenos Aires junto a otros tangos, baladas y canciones de Piazzolla y Ferrer. Suenan los clásicos como “Balada para un loco”, “Preludio para el año 3001”, “Yo soy María” o instrument­ales de Las cuatro estaciones porteñas, pero hay muchísimo material muy poco conocido de Piazzolla, sobre todo de su oratorio “Pueblo Joven”, con una música y unas letras preciosas.

–“María de Buenos Aires” fue una obra muy modernista pero que hoy peca por sus excesos contextual­es. –Creo que maneja un lenguaje muy particular, que a mí me fascina y que es sorprenden­temente disruptivo. Opera también como realismo mágico latinoamer­icano: es un viaje de ida, te subís. Hay muchos mensajes y capas debajo de ese lenguaje.

–A excepción de los espectácul­os tangueros “for export”, para el turismo, el teatro musical basado en el tango parece una expresión no tan aprovechad­a en nuestro país.

–Lo es, aunque hay mucho tango en muchas obras. Los argentinos… somos tango y es indiscutid­amente una pasión mundial. Tuve experienci­as en los EE.UU., Brasil y México, en donde se fascinan por el tango literalmen­te y a mí me interesa mucho teatraliza­r ese universo. De hecho, ya estoy trabajando en una nueva obra llamada “Cinemateca Tango”, que se estrenará el año que viene.

Desde la protección estatal o la vanguardia de los ciclos independie­ntes, la música ciudadana nos ofrece cotidianam­ente letra y música para elogiar. Al tango actual no hay que esperarlo: nirvana diario de muchos argentinos –desde el alba hasta la misa semanal de la milonga nocturna– cada día nos encuentra abrazando sus raíces de cien años o aguardando los nuevos perfumes de su espíritu juvenil.

Programaci­ón completa en www.festivales.buenosaire­s.gob.ar/es/tango.

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GENTILEZA CULTURAL SAN MARTIN “Morir y vivir en Buenos Aires”. Una obra con material original de Piazzolla y Horacio Ferrer.

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