Zorros, ratas, víboras y otras criaturas pueblan las líneas de Patricia Severín, en las que por detrás y por delante de una aparente ingenuidad se deslizan insinuaciones más perturbadoras. Versos con bichos
/Hoy me fui de todos y de todo de mí de Dios tan jodida me fui resbalando por mi cuerpo haciendo equilibrio con la sombra de las uñas
Hoy me fui sin cantar –yo nunca supe– guiñando un ojo a la vergüenza
desnuda sobre la helada me fui/
I - con búfalo
En la Westfalia
–antigua estancia de los ingleses– crían búfalos
Se piensan libres
–la impronta de su pasado los persigue–
Tienen muchas hectáreas por delante y no divisan alambres
Pero los alambrados están más allá de sus ojos y al fondo de las hectáreas después de los esteros detrás del monte
el río que nadie se atreve a cruzar
IV - con otras víboras
La yarará no traiciona Muerde
Para la coral no hay antídoto La cascabel se anuncia por su cola
Ninguna ataca porque sí No son seres humanos
XI - con zorros
Hay muchos zorros ahora por acá
: ya no los matan No pagan nada por sus cueros, dicen
El zorro es un animal sonriente y cuando una le ve la cola, dan ganas de tenerla no se piensa en el mordisco ni en que se hace el muerto para desorientar
XXII - con ratas III - con víboras
Tengo encerrada una serpiente en un frasco verde En realidad el frasco es transparente la serpiente es verde
No es una serpiente
dice mi hija es una culebra enorme y larga destrozada por un perro
Soledad colecciona culebras serpientes víboras Reptiles
En fin
: mira la belleza donde pocos la ven
Se ha vuelto sabia
Puede raspar escamas para separar lo que parece de lo que es A la noche las escucho correr por el entrepiso de madera
Cada temporada retornan
No hay veneno que las mate para siempre
Nuestros vicios se deslizan solapados como ellas