Polémica: el derecho a permanecer gorda
A propósito de “La gordura como bella disidencia”, sobre el activismo gordo, publicada en Ñ 764:
¿Revolución con gordura? ¿Rebelión con tabaquismo? ¿Liberación con las drogas? Contradicción de conceptos. Confusión estrepitosa. Aceptemos e incluyamos, pero no por eso creamos que ser gordos está bien. ¿Que mis kilos son exceso? Claro. Pero nunca libertad... que me pesan, que me enferman, que no me dejan mover, se cargan mi corazón, me revientan la columna, producen hipertensión. Las posturas en el sexo pasan a ser revolcón. El hígado se resiente, el calor me descoloca, y no puedo ni pensar con tanta comida en la boca. Ni rechazo ni admiración. Aceptación y consejos, que ser gordito en exceso me lleva a la destrucción.
GABRIELA CAPDEVILA ECENARRO
¡Bien aprendido tu discurso en contra de los gordos! ¡¡A seguir con tu dieta y ser una triunfadora social entonces!! Yo te acepto.
ADRIANA SOSA BARTHORY
A menos que sea un desorden hormonal, ser gordo es una (mala) elección. Claro, es mucho más sencillo victimizarse.
SEBASTIÁN CAMPANELLO
Un texto obeso por donde se mire. RODRIGO A. ITURRIETA
No es cuestión de ser gordo o flaco, es una cuestión de salud. Tener unos kilos de más no nos hace daño, pero estar gordo no es saludable.
EUGE LP MORENO