Cambios en varios museos
Las gestiones de los nuevos directores de museos nacionales –la mayoría asumidos por concurso público y abierto por primera vez en la historia– comenzaron este año a hacer notar los frutos de su trabajo, luego de haber ganado los concursos nacionales organizados en dos tandas: la primera entre 2016 y 2017 y la segunda en septiembre y diciembre de este año. En algunos de estos museos, los cambios que se observan son radicales. Por ejemplo, en el Museo Nacional de Arte Decorativo (MNDA), donde el arquitecto Martín Marcos ganó su puesto. Ahora es posible visitar alllí las habitaciones de la familia Errázuriz, antiguos propietarios del palacio que alberga al museo, antes inaccesibles: dormitorios, vestidores, inmensos baños con su mobiliario, utensilios y artefactos de uso cotidiano, además de una importante colección de retratos en miniatura y algunas valiosas pinturas de los siglos XVII y XVIII.
Otro museo que dio un giro es el Museo del Traje, en San Telmo. La diseñadora de indumentaria Victoria Saldías, que ganó el concurso y asumió como directora en junio de 2017, impulsó una serie de cambios este año, como distintas actividades los fines de semana y muestras temporales dedicadas a los hacedores de la moda nacional. Entre ellas, la dedicada a la tucumana Mary Tapia,y Vegetabilia, que vinculó el universo vegetal con la indumentaria contemporánea.
Por su parte, el MAMBA, dirigido por Victoria Noorthoorn, este año inauguró salas de exposición, una sala educativa, la magnífica escalera-escultórica, y un café: en total, 1.700 metros cuadrados más, que convirtieron al museo en uno de los más grandes del país.