Los sonidos del silencio
Cuando el 27 de agosto de 1920, desde la terraza del porteño Teatro Coliseo, se dio por inaugurada la radio en la Argentina, con la transmisión de la ópera Parsifal, de Richard Wagner, luego de las palabras de Enrique Telémaco Susini, se produjo otro hecho novedoso: esa emisión, la primera del nuevo medio en el país, estaba siendo grabada porque, con razón, se consideraba un hito en la historia cultural. Así, mediante un disco de pasta, se guardó para la posteridad esa introducción verbal realizada por Susini. A diferencia de lo que ocurrió con el cine y, años después con la televisión, la primera experiencia oficial iba a estar grabada en el soporte original. Pero esa copia también se evaporó con los años. Oscar Bosetti, profesor titular del Taller de Radio en Ciencias de la Comunicación de la UBA, señala: “Susini en 1970 durante un homenaje a él y a sus compañeros, dijo que al considerar un hecho trascendente esa primera emisión, la grabaron. Una copia la heredó su viuda, Alicia Arderius, y otra estaba en el Archivo General de la Nación. Con el tiempo se fueron perdiendo”.
El grueso de los programas humorísticos, musicales y radioteatrales del boom de la radio, durante los 40 y 50 no sobrevivieron en ningún registro. “Curiosamente sí han sobrevivido bastantes audios de momentos históricos fuertes de la Argentina, por ejemplo del golpe de Estado de 1955”, indica Bosetti, autor de Radiofonías, entre otros libros.