Schvartz, a la Tate Modern
Un lote de seis obras de la artista argentina Marcia Schvartz se incorporaron a la colección de la Tate Modern, la institución oficial británica dedicada al arte moderno, según anunció esta semana la galería Vasari. La Tate compró, por una suma no informada, cuatro dibujos de la artista de los años 70, que retratan con vitalidad a los personajes de la Barcelona a la que llegó exiliada. “Dibujaba sobre papel porque no tenía taller, nada: vivía en una pensión”, le dijo Schvartz a Clarín. Además, ya están también en la web de la Tate, dos pinturas de una serie de tangueras, que había emprendido en los primeros 2000. Son obras que tematizan la soledad, el alcohol y la menstruación, a través de figuras femeninas. “Viste que siempre es la pobrecita o la malvada y la verdad es que hay un montón de diosas del tango y quedó como que siempre es el hombre que habla de la mujer, con un lugar medio triste”, detalló.
“Marcia es la mejor pintora de su generación”, expresó Marina Pellegrini, directora de Vasari. El germen de la adquisición, contó, llega hasta la feria arteBA 2019, cuando el curador de arte latinoamericano de la Tate, Michael Wellen, estuvo de visita y se llevó a Londres una instalación de Liliana Maresca. También se enteró de la obra de Marcia Schvartz, por la que volvió en el verano de 2020 y “revolvió literalmente todo el taller”, según la galerista. Elegidas las obras, comenzó una negociación que fue cerrada a fines de 2021, con el visto bueno del comité de conservadores.
El ingreso de la argentina a esta importante colección se suma a su presencia en la del
Museo Reina Sofía, en Madrid, y la del Bronx Museum of Arts, en Nueva York, donde en 2021 tuvo una retrospectiva que fue recibida con elogiosas reseñas. Y responde a una tendencia global con foco en la pintura figurativa hecha por mujeres, sobre todo con ese trazo de la cruda realidad como el de la portuguesa británica Paula Rego, también en la Tate, y junto a la cual seguramente Schvartz será exhibida pronto. “Su expresionismo fuerte y comprometido, con obras que hablan del feminismo y la política, contienen reivindicaciones que están más vigentes que nunca”, concluyó Pellegrini.