GLOSARIO ASTROLÓGICO
Benéfico.
Diversas tendencias astrológicas clasifican a algunos planetas, signos y aspectos como benéficos y a otros como maléficos. Los planetas benéficos serían el Sol, Júpiter, Mercurio (dependiendo del astro que se encuentre a su lado, si está acompañado), Venus y la Luna; los buenos aspectos serían el trígono, el sextil, el semisextil y el quinconcio; las casas benéficas la I, II, III, IV, V, VI, IX, X y XI.
Cabeza de Dragón.
Es el nombre dado al nodo lunar norte. Su influencia es expansiva y permite el acrecentamiento de la casa que ocupa. Según algunos autores, representa la sexualidad.
Cáncer.
Signo del elemento agua que rige aproximadamente del 21 de junio al 21 de julio. Su símbolo es el cangrejo, que hace alusión a la tendencia de caminar hacia atrás, permitiendo que sus nativos tengan muy en cuenta el pasado. El canceriano generalmente es muy apegado a su familia, en especial a la madre, y tiene necesidad de recibir afecto. Precisa tener cuidado para no dejarse envolver por el sentimentalismo o por las fantasías improductivas. En el amor es romántico y sueña con una pareja perfecta. Busca una relación estable y considera importante constituir una familia. Está regido por la Luna
Capricornio.
Signo del elemento Tierra que rige aproximadamente del 22 de diciembre al 20 de enero. Representado según algunos astrólogos, por un ser
que es mitad pez y mitad cabra, muestra el conflicto entre dos fuerzas opuestas una relacionada con la tierra -cabra-, significa la realidad material; otra, simbolizada por el pez. se corresponde con el agua, que es sinónimo de emoción. El capricorniano acostumbra a ser laborioso, tímido, idealista y perseverante, pero corre el riesgo de transformarse en materialista. Como es cauteloso en el amor, puede permanecer célibe. Teme a las pasiones, por miedo a sufrir. Su planeta regente es Saturno.
Casas.
Son doce divisiones de tamaño variable que se encuentran en los temas natales y que se originan fundamentalmente por la latitud del lugar; su distinción se establece por medio de los números romanos. Representan las áreas externas de nuestra vida. Determinan la manera como nos mostramos al mundo y la influencia que los factores externos pueden ejercer sobre nosotros. La casa I indica cuál es nuestro yo exterior; es decir, la personalidad que proyectamos. La casa II nos revela la habilidad de manejar el dinero. La casa III denota nuestra manera de comunicamos con las personas y la relación que tenemos con hermanos y hermanas. La casa IV proporciona datos sobre la familia, en especial de la madre. La casa V es todo lo que se refiere a la creatividad, las artes, los amores, los hijos y el placer. La casa VI se relaciona con el trabajo, las pequeñas dolencias, los animales domésticos y con todo lo que exige disciplina. La casa VII nos habla del matrimonio, de los contratos y de las sociedades de trabajo. La casa VIII es la de las transformaciones, la sexualidad, la muerte y todo lo que permanece oculto.