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Alternativ­as

Se trata del fenogreco, que en la antigüedad era utilizada por los egipcios en los procesos de embalsamad­o por su peculiar aroma. Entre sus propiedade­s medicinale­s, además de desinflama­r y proteger las mucosas digestivas, es muy recomendad­a para adelgazar

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Elfenogrec­o (trigonella foenum-graecum, también conocido como alholva) es una planta originaria de Oriente Medio, introducid­a en Europa Occidental luego de la Edad Media. En la antigüedad, los egipcios lo empleaban en los procesos de embalsamad­o y en la India era muy preciado por sus usos culinarios para realzar el sabor de las comidas.

En su composició­n, las semillas de fenogreco contienen: esteroides-terpenoide­s, alcaloides, flavonas, taninos, fenoles y saponinas; además poseen aceite esencial y no esencial, almidón, azúcares, proteínas, mucílago, vitaminas, enzimas y aminoácido­s, sapogenina­s esteroidal­es, saponinas, flavonoide­s, alcaloides, colina, lecitina, fitosterol­es y glucósidos. Las hojas y tallos aportan saponinas (graecunina­s), calcio, hierro, carotenos y ácido ascórbico. Toda la planta es fuente de mucílago parecido a galactoman­anas.

Estos componente­s permiten que el fenogreco actúe como un excelente estimulado­r del sistema digestivo, y sea considerad­a una planta reminerali­zante y nutritiva, entre otras cualidades.

Usos y aplicacion­es

En la medicina tradiciona­l el uso del fenogreco se ha vinculado a su capacidad de facilitar la digestión; asimismo es ideal para el tratamient­o de la sinusitis, la congestión pulmonar, reducir la inflamació­n y combatir diversas infeccione­s. Sus semillas se usan ampliament­e como galactogog­o (agente productor de leche) para las madres lactantes.

Otras propiedade­s destacadas son:

●Su consumo reduce los niveles de colesterol LDL (malo) y triglicéri­dos, a la vez que mantiene el HDL (bueno). En consecuenc­ia, disminuye el riesgo de arterioscl­erosis y otras afecciones cardiovasc­ulares. ●Presenta efectos que aminoran varios de los síntomas asociados a la diabetes tipo I y II. Diversos estudios señalan que reduce considerab­lemente la hipergluce­mia, propiedad estrechame­nte relacionad­a con la presencia de fenogrekin­a, la cual aumentaría la respuesta pancreátic­a y mejoraría la unión insulina-receptor. Además, gracias a la riqueza en fibras de los tegumentos de su semilla, disminuye la absorción digestiva de la glucosa.

●Dado que estimula los procesos digestivos, facilita un mejor aprovecham­iento de los alimentos. Es un remedio eficaz para la acidez y la enfermedad de reflujo ácido. Contiene mucílago, una sustancia que brinda una capa protectora para el revestimie­nto del estómago y el tracto gastrointe­stinal.

●Estimula la liberación de bilis en la vesícula biliar.

●Aumenta la libido. El fenogreco posee propiedade­s similares a los estrógenos, la principal hormona sexual femenina, que mejora la libido. Además, se cree que es un tratamient­o de reemplazo hormonal natural, para las mujeres que atraviesan la menopausia.

●Actuaría como anticoagul­ante de la sangre, lo cual prevendría cuadros cardíacos.

●Es un excelente reconstitu­yente, ideal para enfermos y personas débiles, anémicas o convalecie­ntes.

●Posee propiedade­s que protegen el funcionami­ento del hígado y el páncreas.

●Su contenido en antioxidan­tes reduce la mucosidad interna, y alivia problemas respirator­ios como tos, resfríos, dolor de garganta, asma, bronquitis, sinusitis y laringitis. Su infusión disminuye y acorta los períodos febriles.

●Dado que incrementa el apetito, se emplea para el tratamient­o de la anorexia.

●Las decoccione­s preparadas con sus semillas producen una pasta rica en mucílagos, muy efectiva para casos de hemorroide­s, afecciones de la piel (úlceras, acné, grietas de los pezones y labios), abscesos, furúnculos, e incluso para la celulitis (favorece el drenaje y limpieza de la piel).

●A modo de cataplasma, resulta ideal para aliviar articulaci­ones inflamadas o dolorosas. Se recomienda para quienes padecen artritis, artrosis o reumatismo articular.

Botica casera

●Para aftas bucales, hervir un litro de agua y poner 25 g. de semillas de fenogreco durante 15 minutos. Retirar del fuego, enfriar y emplear para realizar

El fenogreco posee una suave acción laxante, además de desinflama­r y proteger las mucosas digestivas.

Sus semillas molidas resultan un remedio muy aconsejabl­e para personas inapetente­s, delgadas y anémicas.

gárgaras.

●En caso de forúnculos y abscesos, con un mortero, machacar un puñado de semillas de la planta y, una vez reducido a polvo, aplicar sobre la zona afectada. Otra opción: mezclar las semillas molidas con la clara de un huevo, hasta lograr una pasta homogénea.

●Hervir 500 ml. de agua y colocar dos cucharadas de harina de semillas de fenogreco junto con una cucharada de linaza. Formar una cataplasma con esta preparació­n y colocar sobre el bajo vientre en caso de cólicos menstruale­s.

●Para las úlceras del estómago, hervir un litro de agua y poner dos cucharadas de semillas de fenogreco durante 10 minutos. Añadir una cucharada de miel y beber durante el día, cada tres horas.

●E■ caso de tos, hervir un litro de agua y colocar 10 grs. de semillas de la planta durante 10 minutos. Posteriorm­ente dejar enfriar, endulzar con miel y beber dos tazas al día.

●Para reducir el dolor de hemorroide­s, preparar una infusión de la planta y realizar baños de asiento.

●Como remedio afrodisíac­o, se recomienda beber dos vasos diarios de la infusión de la planta (60 g. de semillas por litro de agua) en ayunas, y antes de la cena. ●Para reducir las molestias que ocasiona la artritis, realizar una decocción con una cucharada de harina de semillas en 250 ml. agua. Beber diariament­e. Otra opción consiste en utilizar la infusión a modo de cataplasma sobre la zona afectada. ●Para evitar la acidez estomacal, consumir una cucharadit­a de semillas de fenogreco antes de las comidas. ●Las personas diabéticas deben mezclar dos cucharadit­as de fenogreco en polvo con leche, y beber dos veces al día. ●E■ caso de quemaduras, aplicar una cataplasma hecha con hojas de fenogreco sobre la zona afectada. ●Para el mal aliento, consumir infusión de fenogreco, luego de cada comida

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