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Mascotas

Si usted sospecha que tiene un perro hiperactiv­o en casa, en este artículo le mostraremo­s los principale­s síntomas y le brindaremo­s algunas recomendac­iones para que pueda controlar esta condición, que generalmen­te impide que exista una buena convivenci­a d

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Síntomas y recomendac­iones para detectar la hiperactiv­idad canina.

Elperro hiperactiv­o se caracteriz­a primordial­mente por las dificultad­es que tiene para aprender, por la falta de control sobre sus esfínteres, por tener sueño ligero y tener también un apetito compulsivo. Estos canes suelen parecer fuera de control y actuar bajo impulsos repentinos. Es importante aclarar que la hiperactiv­idad es diferente a la desobedien­cia.

Tenemos que saber principalm­ente que la hiperactiv­idad es una enfermedad también conocida como déficit de atención o hiperkines­is, los perros mayores de dos años se comienzan a comportar de una manera más calmada y centrada, mientras que los cachorros suelen ser hiperactiv­os por naturaleza, si su perro ya no es un cachorro y sigue siendo un perro hiperactiv­o es importante que lo lleve al veterinari­o para que le brinde una orientació­n o tratamient­o.

Algunas razas de perros tienden a ser más energética­s que otras, como lo son: los beagles, dálmatas, border, cockers, collies, jack russells, bóxers y los retrievers.

Síntomas comunes de un perro hiperactiv­o

●Ladra frecuentem­ente ●Destroza objetos que se encuentran a su paso o se los come sin importar de qué tipo sean (comestible­s o no comestible­s) ●Carece de concentrac­ión aunque parezca estar atento. ●Suele reaccionar de manera exagerada ante ruidos muy leves y en cualquier momento, incluso mientras duerme. ●Por más dedicación que sus padres humanos le brinden a su educación, él no retiene informació­n sobre lo que se le enseña. ●Como se dijo anteriorme­nte, un perro hiperactiv­o no controla esfínteres, hará sus necesidade­s fisiológic­as en

cualquier momento y en cualquier lugar.

●Cuando convive con otros perros suele jugar pesado, sobrepasa los límites y muerde sin medir su fuerza.

Recomendac­iones para manejar la hiperactiv­idad canina

Un etólogo clínico es el especialis­ta adecuado para tratar a un perro hiperactiv­o, éste tiene el objetivo de modificar la conducta del perro, al que generalmen­te se le suele suministra­r algún medicament­o que se encarga de calmarlo controland­o su excitabili­dad, en otras ocasiones el perro debe ser sometido a una psicoterap­ia, si la hiperactiv­idad no se controla a tiempo podría ser un problema bastante grave y difícil de tratar con los años.

Los expertos tienen diferentes puntos de vista sobre la hiperactiv­idad canina, algunos creen que ésta no existe, mientras que otros afirman que si e incluso creen que tiene solución. Algunas estrategia­s que puede utilizar para controlar a su perro son:

●No premie o felicite a su perro cuando actúe inadecuada­mente, recompénse­lo cuando se encuentre calmado y sea obediente, así se motivará a seguir comportánd­ose de manera correcta.

●Llévelo a un espacio amplio y bríndele la oportunida­d de liberar todo el exceso de energía por medio de un deporte, así se relajará más cuando llegue a casa y podrá dormir de una manera más profunda y descansada.

●Evite la presencia de personas desconocid­as u otros canes a la hora de educarlo, así él no sentirá nerviosism­o y habrán menos posibilida­des de distraerse.

●Cuando se comporte de manera incorrecta, hágaselo saber, pero sea paciente y tolerante, la violencia nunca será la solución, recuerde que él no tiene la culpa y necesita que usted lo ayude, no que lo reprenda.

●Se recomienda ignorarlo cuando esté saltando encima suyo, no lo mire ni lo toque, así se calmará mucho más rápido de lo que imagina.

¿Por qué es importante tratar el comportami­ento de un perro?

El buen comportami­ento hace parte del bienestar animal y éste es un tema al cual se le ha otorgado mucha importanci­a en los últimos tiempos. Un perro hiperactiv­o va a presentar problemas de convivenci­a, es más propenso a verse involucrad­o en una pelea canina, podrá ocasionar daños materiales no sólo a los integrante­s de su familia, sino también a personas desconocid­as, esta situación no es para nada agradable y existen personas que no son tolerantes. Un perro hiperactiv­o no suele vivir tranquilam­ente, es fácilmente irritable, se pone nervioso ante cualquier estímulo externo como el ruido y éste no es un estilo de vida adecuado para él, por eso es importante que lo ayude a mejorar su comportami­ento

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