Las 10 virtudes terapéuticas de la gelatina
Es un polvillo compuesto en su mayor parte por proteínas, obtenido como resultado del procesamiento de colágeno animal, que luego se disuelve en agua para formar el alimento y obtener su típica consistencia transparente y movediza. Es precisamente dicha p
El origen de la gelatina se remonta a épocas muy lejanas. Existen fuentes que documentan que en los banquetes, en siglos pasados, las especialidades de gelatina se consideraban platos especialmente exquisitos. Incluso desde la centuria de 1700
(el siglo XVIII) se encuentra documentado el uso de la palabra “gelatina” (latín: gelatus = tieso, helado) en la lingüística europea.
Este alimento se define como una proteína pura, que se obtiene de materias primas animales que contienen colágeno. Procede de dos fuentes principales de tejido conectivo: por un lado, los huesos y la piel, y por el otro, el cuero (después de extraídos el pelo y la grasa). Por lo tanto, es un polvillo compuesto en su mayor parte por proteínas, obtenido como resultado del procesamiento de colágeno animal, que luego se disuelve en agua para formar el alimento y obtener su típica consistencia transparente y movediza. Es precisamente dicha proteína de
colágeno la que brinda a la gelatina sus beneficiosas propiedades. Luego de un complejo proceso de extracción y secado se obtiene la grenetina (gelatina en estado puro) que se emplea para distintos fines, ya sea en el campo de la alimentación o la cosmética.
En su composición se destacan proteínas (90%), de 1 a 2% de sales minerales y abundante agua. La gelatina no contiene conservantes ni aditivos; no posee colesterol ni purinas. Tradicionalmente relegada a la repostería, la gelatina es algo más que un postre fácil de preparar: es un ingrediente muy atractivo a la hora de cocinar platos elaborados y deliciosos, tanto dulces como salados, con un elevado valor nutritivo. Además de sus aplicaciones en la alimentación, en la composición de productos bajos en grasas, como margarinas, quesos y yogures, la gelatina se emplea en la industria farmacéutica (para recubrir y proteger los medicamentos) o en la fotografía (para la fabricación de películas para aficionados, papel de color, películas gráficas y películas de rayos X en cantidades industriales).
Buena para la salud
Como se mencionó anterior- mente, la gelatina es proteína en estado puro. Gracias a su consistencia se digiere fácilmente y el organismo la descompone completamente. Otra ventaja que merece destacarse es su aporte de aminoácidos -especialmente glicina y prolina- que mejora la construcción de las estructuras del organismo, fundamentalmente huesos, cartílagos, tendones y ligamentos. Un déficit de aminoácidos repercute en la manifestación de dolores articulares, uñas quebradizas y pelo seco. La gelatina contiene estos aminoácidos en una concentración hasta 20 veces más elevada que en otros alimentos con proteínas. Otros beneficios destacables son: 1
El colágeno refuerza los tendones y los ligamentos que unen los músculos a los huesos, y es el responsable de la cicatrización y regeneración de los tejidos. Por lo tanto, la gelatina también beneficia la nutrición de esos tejidos, mantiene la hidratación y la integridad de las articulaciones, y trata dolores articulares como artrosis, y previene la osteoporosis. 2 No contiene grasas ni colesterol, por lo cual resulta un alimento apto para toda la familia, y especialmente para quienes presentan niveles elevados de colesterol. 3
Su gran contenido de agua favorece la correcta hidratación y produce saciedad; por este motivo, la gelatina es una aliada de las dietas para adelgazar. 4
Dado que resulta muy fácil de comer y digerir, se recomienda para personas que padecen problemas estoma- cales (gastritis, cólicos, colitis o acidez). 5
Como se mencionó anteriormente, la presencia de glicina y prolina contribuye al fortalecimiento de huesos y articulaciones, incluso para la regeneración de los tejidos y el buen funcionamiento del aparato locomotor. 6
Resulta muy efectiva para estimular la construcción muscular, debido a la presencia de los aminoácidos arginina y glicina, así como para estimular el metabolismo y fomentar la eliminación de grasas. 7 Se incluye en la alimentación como una dieta blanda recomendada para los infantes, personas de la tercera edad y enfermos. 8
Gracias al colágeno, la gelatina brinda elasticidad, hidratación y firmeza a la piel, fortalece las uñas y el cabello. 9 El mercado ofrece una amplia variedad de gelatinas de frutas de diferentes sabores y colores, varias de ellas enriquecidas con vitaminas A, C y E. Si bien este contenido no es comparable con el que presentan las frutas frescas, la gelatina puede consumirse a modo de colación o como una manera de ofrecer a los más pequeños un postre ligero, colorido y diferente. 10 Soluciona la necesidad de agua en forma eficiente. Por ejemplo, si un atleta bebe agua luego de un entrenamiento o una prueba puede padecer algún problema gástrico; con la gelatina, ese riesgo no existe. Además, recientes estudios demostraron que su consumo beneficiaría a las personas con problemas de artritis, dado que la grenetina es un buen vehículo para que los nutrientes que se encargan del fortalecimiento de cartílagos y de la acción generativa del hueso, tales como el calcio, puedan ser asimilados por el organismo.
Por lo tanto, la gelatina es un complemento alimenticio que puede encontrarse en una gran variedad de formas, colores y sabores. Si se combina con frutas, jugos naturales o leche se obtiene un gran aporte nutricional, ideal para los más pequeños.
Recetas con gelatina
Rica menta
Ingredientes: 500 ml. de agua, un puñado de hojas de menta, 80 grs. de azúcar, dos sobres de gelatina sin sabor, 240 grs. de frutos rojos (frambuesas, moras y grosellas). Hervir el agua con el azúcar y las hojas de menta. Dejar reposar unos minutos y colar el agua. Disolver la gelatina en el agua caliente y dejar enfriar sin que solidifique.
Preparar la fruta y limpiarla. En moldes o flaneras individuales, verter una capa de gelatina de un centímetro y otra una capa de frambuesas. Dejar solidificar y repetir el proceso, y alternar con cada variedad de fruta. Guardarla en la heladera al menos durante cuatro horas. Desmoldar, servir y adornar con hojas de menta. Copa fresca
Ingredientes: dos potes de yogur, 200 grs. de crema chantilly, 200 grs. de frutas (durazno, manzana, banana), cuatro cucharadas de queso blanco descremado, una cucharadita de edulcorante, una cucharadita de esencia de vainilla y un sobre de gelatina dietética. Mezclar los yogures con las frutas peladas y cortadas en cubos, el queso blanco descremado y la esencia de vainilla. Por otro lado, preparar la gelatina con la mitad del agua indicada en el envase; esperar a que enfríe y se espese. Agregar a la preparación anterior, mezclar en forma envolvente y disponer en copas. Conservar en la heladera hasta el momento de servir. Decorar con un copete de crema chantilly ■