¿Qué es la miopía patológica?
Es una enfermedad de la retina. Consiste en el crecimiento de vasos sanguíneos anormales en el fondo del ojo, lo que puede causar un deterioro irreversible de la visión central. La ANMAT acaba de presentar una nueva medicación para su tratamiento.
Se conoce con el nombre de miopía patológica a un crecimiento anormal de vasos sanguíneos en la mácula del ojo. Esta enfermedad es la complicación visual más común en personas con miopía elevada, y suele presentarse en personas de menos de 50 años. La miopía patológica suele impactar a adultos en edad laboral, afectando entre el 1 y el 3% de la población.
En pacientes con este tipo de miopía no tratada, la evolución a largo plazo es deficiente, y cerca del 90 por ciento experimenta una pérdida severa de la visión en un lapso de cinco años. “Esta pérdida de visión suele afectar a personas con menos de 50 años e impacta negativamente en la productividad, el desarrollo económico, la proyección profesional y la calidad de vida”, sostuvo el Dr. Marcelo Zas, médico oftalmólogo, Jefe de la Sección Retina de la División Oftalmología del Hospital de Clínicas “José de San Martín” de la Universidad de Buenos Aires.
En esta patología, explicó el Dr. Zas, el globo ocular experimenta un agrandamiento de su longitud axial (diámetro de delante a atrás), “lo que produce un estiramiento de la retina y puede generar rupturas y formación de nuevos vasos sanguíneos en la mácula (se denomina neovascularización), algunos de los cuales se rompen y generan hemorragias y edema, causando, a su vez, una disminución aguda de la visión central”.
Esta enfermedad es la complicación visual más común en personas con miopía elevada, y suele presentarse en personas de menos de 50 años.
Nueva medicación aprobada
Recientemente, la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT) acaba de aprobar el uso de una nueva medicación (ranibizumab) para el tratamiento de esta enfermedad. La reciente autorización convierte a ranibizumab, el único medicamento específicamente diseñado para su uso oftalmológico que ha demostrado en estudios clínicos preservar y mejorar la visión de los pacientes, en el primer tratamiento aprobado en Argentina con cuatro indicaciones, considerando que ya se lo usaba para el tratamiento de la Degeneración Macular Relacionada con la Edad, el Edema Macular Diabético y el Edema Macular Secundario a la Oclusión Venosa de la Retina.
Según el prospecto aprobado en Argenti
na, el tratamiento de la neovascularización coroidea secundaria a miopía patológica con ranibizumab comienza con una única inyección. Cualquier aplicación posterior dependerá de la evolución y respuesta individual de cada paciente. La decisión de volver al tratamiento depende de cambios anatómicos y de alteraciones en la visión, y es necesario realizar controles mensuales durante los primeros dos meses, y luego, al menos un control cada tres meses, durante un año. En el segundo año de seguimiento, la frecuencia de control la fija el especialista, según criterio y respuesta al tratamiento de cada paciente.
Prevalencia en nuestro país
Se desconoce el número fehaciente de personas que padecen en nuestro país neovascularización coroidea secundaria a miopía patológica, pero podría efectuarse una aproximación estimada utilizando los datos epidemiológicos de publicaciones de otros países, por carecer de datos locales. El estudio Beaver Dam Eye Study detectó que la prevalencia de alta miopía (mayor a 6 dioptrías) es del 3,8% en la población mayor a 43 años. Por otro lado, se sabe que el riesgo de desarrollar una membrana neovascular en pacientes con alta miopía es de un 5-11%.