LOS CUIDADOS NECESARIOS PARA REALIZAR LA DIETA
jugos y licuados
Los primeros días son para que el aparato digestivo trabaje lo menos posible. Para esto, lo mejor es colar los licuados y luego tomarlos. También, colar los jugos, que además deberán diluirse con agua. Lo importante es estar en contacto con un profesional que monitoree cómo siente con esta dieta que adelgaza a través de una alimentación sana y natural. Durante los dos primeros días de la dieta es preferible beber jugos y licuados de frutas cítricas, de kiwi, manzana y pera. Esté atento al grado de tolerancia que su organismo presenta ante cada una de estas frutas y sus preparados.
Tenga en cuenta que existen tres tipos de frutas. Las que contienen: 1. Entre 5 y 7 por ciento de hidratos de carbono. En general, son todos los cítricos, el ananá y la sandía. 2. De 10 a 12 por ciento de hidratos de carbono. Se trata de la gran mayoría de las frutas: peras, manzanas, duraznos, frutillas, damasco, ciruelas... 3. Un 20 por ciento de hidratos de carbono: las bananas, los higos y las uvas. Que tengan más cantidad de hidratos de carbon no significa que no haya que utilizarlas porque una banana chica de 75 g y una manzana de 150 g tienen el mismo nivel calórico. En el transcurso de la semana, pueden aparecer leves dolores de cabeza, que no tienen mayor trascendencia y desaparecen solos. Préstele atención a los valores de la presión arterial. Luego de la primera semana se pasa a un plan de mantenimiento. Debe ser indicado por un médico, según la condición física y el estilo de vida de cada uno.
Conviene elegir las frutas y verduras de la temporada, que deberán tener colores intensos, textura firme y aroma agradable y perfumado. Además, como son de estación, la relación calidad-precio es mucho mejor, el tiempo de almacenamiento es menor y el precio disminuye debido al aumento de la oferta. Será mejor aun si proceden de cultivo orgánico, ya que no contienen plaguicidas y poseen más sabor y nutrientes.
Deben tomarse inmediatamente después de preparardos, para que no se resienta su contenido nutricional, su sabor ni su color.
Para obtener todos los nutrientes de las frutas y verduras, emplee esas jugueras centrífugas que procesan todo, la piel, las semillas y la pulpa, en pocos minutos.
Asegúrese de limpiar cuidadosamente aquellas frutas y vegetales con los que desee hacer licuado o jugo. Si tienen hojas, como la espinaca o la lechuga romana, enjuáguelas varias veces bajo el agua.
En algunos casos, puede ser necesario sacar la piel, el carozo o las semillas. Algunas semillas, las de cítricos por ejemplo, dan un gusto amargo.
A medida que se vaya familiarizando con el hábito de preparar licuados y jugos, atrévase a experimentar nuevas combinaciones y sabores.
Tenga en cuenta que si bien los licuados naturales no contienen grasas, las calorías se incrementan con las frutas tropicales.