EN LA SIMPLEZA...
Todos reunidos alrededor de una mesa, ejercitamos el poder que tiene la comida de hacernos compartir e interactuar, desde la sal hasta una broma. Recuperemos aquellos momentos que nos hacen disfrutar lo que comemos y la forma en la que lo hacemos
El universo digital se mueve a un ritmo en el que es fácil sentirse abrumado. Cada vez son más los contenidos que se generan en cuanto a cómo debemos comportarnos, vestirnos, hablar, pensar y hoy más que nunca, cómo debemos comer y cocinar. El boom de la comida como un fenómeno que transforma nuestra vida y rutina está explotando cada vez más, desde videos de 30 segundos que detallan cómo hacer un soufflé o un pastel de matcha, hasta blogs con recetas complicadas y engorrosas. Es paradójico imaginarnos cómo las imágenes a veces satisfacen nuestros antojos. Este bombardeo virtual, lejos de acercarnos a la experiencia de la gastronomía cotidiana, probablemente acabe por saturarnos y llevarnos directo a pedir un take out o Uber Eats desde el celular.
A la hora de reunirse con amigos o personas cercanas alrededor de una buena comida, la primera prioridad siempre debe ser dis- frutar y nunca impresionar, debemos poder deleitarnos desde el momento de la preparación. Una receta difícilmente va a poder ser un éxito si estamos estresados sobre dónde conseguir ingredientes demasiado costosos o técnicas culinarias que no dominamos. Otro factor importante a la hora de seleccionar un menú es cuidar mucho la calidad de los ingredientes, como dice Alice Waters, la chef californiana que revolucionó el mundo de la comida con su icónico Chez Panisse en Berkley, “cuando la comida tiene los mejores ingredientes se pueden hacer cosas realmente sencillas y la comida va a ser extraordinaria porque va a saber a lo que es”, comparte. El poder conectar con los alimentos desde el arte de lo sencillo empieza a generar una relación con estos, no solo a la hora de preparar un buen plato para alguien más sino también en la manera en cómo comemos en nuestro día a día. El poder transformador de la comida se manifiesta en todas sus formas. —Rodrigo Molina