PERFIL, Pasado y presente,
Aunque el diseño colombiano no se puede encasillar dentro de una única estética, entre cada artista se resalta ese je ne sais quoi que cautiva mercados LOCALES y extranjeros
En un país lleno de diversidad, color y paisajes, el talento parece multiplicarse. Sin embargo, el diseño colombiano no podría definirse dentro de un estricto parámetro estético, delimitarse en un solo tejido o encasillarse entre una misma silueta o un bolero.
Tampoco podríamos decir que las nuevas generaciones en singular son las que están rompiendo el molde y trayendo propuestas. Parece que, en un momento histórico, nuestros diseñadores, tanto los emergentes y los consolidados, hubieran decidido en conjunto mostrar lo mejor de nuestro país.
Estamos frente a personas que llevaron la moda hacia nuevas fronteras artísticas, explorando paralelamente los tejidos ancestrales, representativos del país y los textiles más modernos.
Esa nueva composición que nos ofrecen estas figuras de la moda, logra armonizar el pasado y el presente, lo artesanal y lo moderno, la vanguardia con lo clásico.
Sentirse orgullosos de sus raíces y mantenerse fiel al ADN de sus marcas, parecen ser factores comunes entre estos personajes de la moda. Esto, precisamente, es lo que los ha caracterizado, logrando resaltar en un mundo donde muchos sueñan estar, pero pocos se mantienen. La coherencia de conceptos, el trabajo dedicado y disciplinado, definitivamente acompañan su talento. Sus colecciones son audaces y auténticas y han captado una audiencia que cada vez se vuelve más conocedora y exigente. Sin duda alguna, los compradores le están apostando a lo original, a esa prenda que los hace sentir orgullosos al usarla, que cuenta una historia, que tiene un autor que los maravilla con su propuesta. Es el acuerdo implícito a esa identidad impresa en el textil, con conocimientos reinterpretados que no rivaliza con su estética.
En la variedad de sus propuestas encontramos una amalgama de opciones: unas ultrafemeninas y otras andróginas, unas resaltando lo artesanal y otras arriesgándose con textiles modernos, algunas con estilos minimalistas y otras llenas de color.
Hoy, sus diseños recorren el mundo mostrando lo mejor de nuestro país. Estos nombres, sin duda, seguirán sonando muy fuerte.