Porcelana onírica,
Descubre la tradición de la casa Hermès que se traduce en esta ocasión en vajillas de lujo.
Un paseo en el jardín es la historia de un english garden, donde florecen formas y flores. Un territorio en el que los colores se amalgaman y la firma Hermès los plasma en sus vajillas. A lo largo de los matorrales y caminitos, el artista canadiense Nigel Peak ha dejado deslizar su lápiz. Una línea a mano alzada que desaparece bajo el esmalte de la vajilla. Sobre la paleta de colo- res, cuatro tintes sutiles, casi primarios: el naranja vivo, el verde follaje, la gota de oro y el azul de Prusia. “El jardín es ese lugar en el que crecen formas y colores. Un lugar creado para la ima- ginación. Bello, en su desorden estudiado”, explica el cómplice de la maison Hermès, que es igualmente artífice de varios de los famosos carrés, catálogos e instalaciones para esta.
En A Walk in the Garden, los dibujos se cruzan por me- dio de juegos arquitectónicos que dan lugar a composiciones
desenlazadas. Ramitas, hojas y gramíneas germinan a través de las cuadrículas, los tableros de damas y las vigas. Una or- ganización estudiada, detrás de un aire espontáneo, es lo que define exactamente a un jardín inglés. El equilibrio natural opera sobre veinte piezas y otros tantos estampados, realzado cada vez por un hilo de luz, entre libertad orgánica y estructu- ra gráfica. Un único objeto de porcelana provoca una mirada concentrada que, al instante siguiente, se evade hacia nuevas ensoñaciones. El servicio entero, por lo tanto, crea en un mis- mo movimiento un jardín sobre la mesa.
Un jardín d’ailleurs destaca entre los once servicios de mesa creados por la casa Hermès por ser una colección “ligera”, fácil, y que nos invita, inmediatamente, a un viaje onírico en nuestra propia casa. El comensal se ve rápidamente transportado hacia unas vacaciones campestres, en las que la protagonista indiscu- tible es la naturaleza.