Una obra sobre Santiago Maldonado.
El actor Fernando Berreta presenta “Lechuga (S. M.)”, obra que reconstruye la identidad íntima de Maldonado. Dirige Toto López. Se estrena mañana.
El actor Fernando Berreta vuelve a escena con una obra que gestó a partir de varias convicciones personales. Este sábado se estrena Lechuga (S. M.), con la dirección de Toto López en Casa Grote. El actor de larga trayectoria se caracteriza por la indagación en el arte del unipersonal.
“En 2016 empecé a sentir que el teatro sirve para algo o es un juego idiota. Estuve un año y medio buscando obra, leyendo. No quería hacer un clásico. En un portal periodístico encontré la nota de Florencia Alcaraz, ‘Lechuga not dead’, una investigación impresionante sobre Santiago Maldonado”, dice el actor.
Lechuga es el apodo familiar de Santiago Maldonado, el joven tatuador desaparecido en la comunidad Pu Lof en Resistencia de Cushamen, el 31 de julio de 2017.
Periodismo y teatro
“Evidentemente, la periodista fue a 25 de Mayo, la ciudad natal de Santiago, con un fotógrafo, y se instaló ahí para hablar con toda la gente que lo conoció. La nota es puntillosa, con detalles de la vida de Maldonado, desde los 5 años hasta que desapareció. Cuando la leí me di cuenta de que tenía acción dramática, va creando suspenso, dan ganas de seguir leyendo. Dándole un soplido a la nota se convertía en un monólogo teatral. Lo hice en una tarde, porque ¡está tan bien escrita! Me junté con Pedro, el músico, le gustó y después pensamos en el director. Nos decidimos por Toto”, cuenta Fernando.
“La nota de la periodista es un material sensible. El desafío fue trasladarlo al espacio y poner el texto en el cuerpo de Fernando Berreta”, agrega Toto.
Se decidieron por un espacio “pelado”, sin nada. Además del actor, el músico Pedro Ferreyra está en escena y la luz de Mario Navarro marca el espacio.
La Laguna Mulita, la plaza Mitre, la confitería de 25 de Mayo aparecen en el relato. “Es una obra bien austera, que podemos hacer en un baldío, en cualquier parte. Planteamos una puesta en la que Fernando se mueve por todos lados y la luz lo va siguiendo, focalizando. Es una recapitulación abreviada de la vida del Lechuga, el apodo más fuerte de Santiago Maldonado. Aparece su infancia, los amigos que armaron una patrulla para pelear contra los ‘fachos’. Santiago llamaba a su pueblo ‘25 de Facho’”, dice Toto.
El monólogo habla del oficio de tatuador, su familia, de la que la opinión pública solo conoce a su hermano Sergio.
“Cuando terminás de ver la obra, después de conocer a los padres, el otro hermano, las cuñadas, la abuela, te preguntás: ‘¿A este tipo mataron?’ ¿Cuántos jóvenes latinoamericanos eligen este costado? Lechuga se definía como anarquista y libertario. Uno de los últimos murales que pinta es un homenaje a Severino Di Giovanni. Pero era un tipo que no mataba las hormigas, que se enojaba cuando de chico su mamá mataba los piojos que le sacaba. Entonces, la cuestión es ‘ojo con el tipo que mataron’”, expone López.
En escena
Berreta se acerca a la historia como relator, sin interpretar los personajes. “Es imposible con mi edad encarnar a un pibe de 28 años. Lo que me convenció para hacer la obra es que Lechuga es parecido a mis amigos. Es un Eufrasio (por el grupo Los Hermanos Eufrasio). No se dedicó a hacer teatro, era un tatuador. Tenía una banda de rock, tocaba la batería. Si al personaje no puedo ubicarlo, verlo encarnado en la realidad de alguien cercano, para mí no tiene valor”, dice el actor.
El músico Pedro Ferreyra es pura presencia en la obra. “Está en escena y va generando atmósferas, climas, efectos. Es una maravilla trabajar con un artista que da improvisación en La Colmena, a los músicos ya recibidos. Sus dedos dicen ‘jazz’. Le da una escenografía sonora. Por eso la música es fundamental en el escenario pelado”, señala Fernando.
“Se ven las calles, a partir del trabajo corporal de Fernando y la iluminación de Mario Navarro. Se ve la laguna, la plaza”, comenta Toto. Y agrega: “Políticamente es mantener viva la memoria de un episodio que conmovió a los argentinos. Ahí se profundizó la grieta. Planificamos hacer un gran acto el día anterior a la desaparición de Santiago, el martes 31. El 1° de agosto se cumple un año de la desaparición de Maldonado. El acto será en el auditorio de Luz y Fuerza. Esperamos contar con su hermano Sergio”. Como adaptador de Lechuga
(S. M.), Berreta buscó que el relato no se basara en el expediente judicial, que puede abordarse por especialistas. “Desde el arte tenemos que mostrar otra faceta: qué persona desapareció y murió, asesinaron, para nosotros”, señala.
A partir de la elección de un texto no teatral, la crónica, Berreta considera el rol de los relatos contemporáneos: “La gran dramaturgia moderna la tienen los periodistas. Si queremos hacer un teatro que sirva a la sociedad, tenemos que hacerlo de la mano de algunos periodistas”.