La fiesta de los videojuegos con la Argentina Game Show
Desde hoy y hasta el domingo se realizará en Buenos Aires el encuentro que reúne a lo último del “gaming” argentino.
Nunca fue más lindo ser gamer que ahora, aunque resulte muy difícil serlo en la Argentina. Nunca antes hubo un encuentro tan grande como el de este fin de semana en Buenos Aires. Esos puntos (la magia de los juegos y un lugar que reúna esa magia) se conectan desde hoy y hasta el domingo en Costa Salguero, que recibirá la cuarta edición de la Argentina Game Show (AGS), “la fiesta de los videojuegos”.
Lo de “nunca fue mejor ser gamer que ahora mismo” tiene que ver con que hay consolas que vuelan, existe la realidad virtual, las PC son las más sofisticadas de la historia, los celulares soportan juegos de última generación; la trama, las interacciones y las dinámicas de los juegos son, para muchos, la gran industria del siglo 21. Los videojuegos están a un nivel que en la década de 1990 era utopía.
En cambio, la parte difícil de ser gamer en la Argentina tiene una única razón: el dólar. Los insumos básicos para tener algo de lo mejor de esa fabulosa oferta gaming es muy cara por el precio del dólar. Un juego como el Fifa cuesta no menos de $3.500 pesos.
Punto de encuentro
Lo del “encuentro gamer” es por la AGS, un lugar a la altura de las grandes exhibiciones de América. Hay de todo: juegos para probar, muestras de las novedades tecnológicas, se lucen las grandes empresas del gaming y se viven shows con las competencias de esports (con Fifa, Call of Duty y muchos más). Por una entrada que va desde los $ 450 se accede a esa experiencia, que ofrecerá un chiche: una arena de 80 PC y 20 Playstation 4 para jugar al Fortnite.
La palabra experiencia es lo que pinta a la AGS, algo que destaca el organizador del evento Walter Costabel, en diálogo con VOS. “Quisimos crear un ecosistema, profesionalizar el encuentro y a la vez humanizarlo. El que viene a AGS tiene una experiencia distinta a jugar en su casa: aquí nos vemos las caras”.
Costabel es un abogado de 44
años, padre de cuatro hijos y emprendedor nato. Se metió en la tecnología a través del mundo de los servidores, algunos que se usaban para videojuegos. En esa interacción con gamers, creció un vínculo que terminó en la fundación de LocalStrike, una empresa de distribución de contenidos de gaming. Y el paso siguiente a LocalStrike fue la AGS.
Acerca de si hay un boom de los videojuegos o existe hoy más visibilidad, Walter no lo duda: “Las dos cosas. Hay millones de jugadores de videojuegos gracias a Youtubers e influenciadores. Todo ayuda. Hay masividad. Y con la AGS ya estamos en el mapa del gaming”.
Costabel cree que al gamer argentino le falta un poco para llegar a producir más profesionales, los que viven de los videojuegos por e-sports o testing de juegos. Pero ve que el proceso va hacia ese punto. Argentina tiene un despertar en la materia. La AGS es la evidencia de ese avance y del más noble sentido lúdico del gaming. Costabel afirma: “Es la fiesta de los videojuegos”.
Córdoba también está encaminada: a fines de agosto se realizó la cuarta edición de la EVA, con récord de público y presencia.