Puente, iluminado en París
“En estos 10 años he tenido un progreso increíble”. El tenor Marcelo Puente se ha mirado rápidamente andando sobre la década que distingue el Konex, y ve sus pasos cargados de fecundidad artística y personal. “Me llegó de sorpresa. Estoy orgulloso porque es un reconocimiento muy lindo de mi país a mi trabajo”. Lo dice desde la Ópera Nacional de París, en un alto de la preparación de la gran puesta de Tosca, de Puccini, en lo que será su primera presentación en el célebre escenario. Llevará consigo el personaje de Mario Cavaradossi, como sucedió en 2007 y 2008 en el Libertador de Córdoba. “Imaginate, del Libertador al Opera...”, dice entusiasmado.
Ha visto fotos del teatro remozado y añora volver. “Ha quedado tan bonito. Tengo muchas ganas de volver a cantar a mi teatro querido, así como al Colón y a otros lugares. Hay proyectos y espero que la nominación ayude a concretarlos”.
Marcelo Puente nació en Rivadavia, Buenos Aires, llegó a Córdoba con su familia siendo un niño y descubrió su vocación y su talento a la vez, cuando ya era estudiante de medicina.
Hace varios años que se mudó a Europa (con residencia en España) y se ha presentado en algunos de los teatros más célebres, como el Royal Ópera House, de Londres. “Todo está funcionando muy bien, incluido mi familia, mi mujer, mis amigos, mis fans. Estoy contento de compartir mi progreso con ellos”, dice, iluminado por la primavera de París.