Nuevos espacios abren sus puertas.
Con la cercanía a las grandes urbes y la exclusividad como bandera, se han inaugurado recientemente pesqueros privados que ofrecen interesantes variantes de pesca y relax familiar.
Con la cercanía a las grandes urbes y la exclusividad como bandera, se han inaugurado recientemente pesqueros privados en cotos, cavas y tosqueras que ofrecen interesantes variantes de pesca y relax familiar.
En urbes cada día más crecientes en población y espacios rurales demasiado urbanizados, somos cada vez más pescadores deportivos presionando los mismos ámbitos a los que vamos siempre. En consecuencia, en todos los espacios que suelen ser de acceso público y cercanos crece la degradación y el rinde no siempre es el mejor para la pesca deportiva. En ese contexto, es de celebrar que se abran nuevos espacios para la actividad, que permitan la escapada rápida de miniturismo: el tiempo que se gana en viaje se aprovecha pescando.
Va r io s d e e s t o s á mbit o s controlados se han abierto en los últimos meses, permitiendo la pesca en contingentes reducidos y regulando cupos, para preservar el recurso en sitios que usualmente son más pequeños que los pesqueros habitua les relacionados con Las Encadenadas de Ruta 2, las lagunas y ámbitos dependientes del Salado, etc. Dueños de campos con espejos otrora privados y tosqueras que se inundaron al llegar a las napas, han decidido encontrarle una vuelta económica a la utilización de esos espacios en la pesca deportiva, a la que suelen complementar con otros atractivos para el disfrute familiar. Aquí van algunas propuestas ubicadas a menos de 100 km de la Capital Federal.
Coto de pesca San Vicente
En los años ’90, Eduardo Catania tuvo el primer pesque y pague de truchas. Luego se desactivó y la parte gastronómica (también tenía un restaurante) le ganó a la pesca y la escuela de acuicultura fue ocupando la mayor parte de la actividad del predio. Felizmente, ahora Eduardo vuelve a abrirlo con distintas propuestas de pesca en ámbitos controlados, con cinco espejos de agua (tres de más de 100 m, uno de 50 y otro más pequeño). El primero ya está funcionando con pesca de tarariras y bagres, pero habrá en breve otro con tilapias. “Hacia el invierno ya debería funcionar otra laguna con truchas y, de cara al verano, quiero que haya pacúes grandes en otro lago y, tal vez en un futuro, surubíes”, dice quien viene criando y enseñando a criar estas especies hace años para alumnos del país y del exterior.
“La idea es hacer un coto con especies que no puedas pescar en una zanja al lado de la ruta –sostiene Catania–. Queremos que vengan familias, que haya bicicletas, sulkys y caba l los pa ra el entretenimiento, no solo del pescador sino también de sus acompañantes. Arrancamos por la pesca y vamos por una propuesta integral y familiar”, concluye.
Están ubicados en el lado opuesto de la laguna San Vicente, al bajar de la Ruta 6, tomando calle Matheu o Almirante Brown, no hay que ir hacia la ciudad sino para el lado opuesto. Se busca en el GPS como Escuela de Acuicultura Productor Acuícola. Desde la ruta 6 queda exactamente a 1.000 metros y luego hay que costear el lateral del predio unos 300 metros hasta el ingreso al establecimiento. Al cierre de esta edición se estaba trabajando en la señalética en conjunto con el municipio.
La Tosquera Extreme
En Pilar se baja en la unión de la ruta 8 vieja y la ruta 8 de Ramal Pilar, para continuar por el camino de las estancias. Antes de llegar a Estancias del Pilar está la escuela Los Robles, hay una virgen grande en el medio de la calle, se la pasa y a los 100 m se dobla a la izquierda bordeando el mismo country Estancias del Pilar, primero a la izquierda, luego a la derecha, y nos encontraremos con la tranquera de entrada a la laguna. Desde la bajada de Panamericana y ruta 8, contando en el destacamento policial que está en el medio del boulevard, hay 6,5 km hasta desembocar en la laguna. Es una gran tosquera que alguna vez estuvo en contacto con el río Luján y que atesora en sus pro
fundas aguas la siembra hecha de pejerreyes, más las especies propias del Luján como bogas, bagres y carpas, que en este ámbito alcanzan portes descomunales. En su temporada 2020 abre oficialmente el sábado 7 marzo y los horarios de pesca serán de 8 a 18:30, todos los días de la semana. En cuanto a los cupos de extracción permitidos, para la pesca de pejerrey serán de 25 piezas como máximo, en tanto con devolución, la pesca es libre. El peje se busca a flote, cambiando de brazoladas pues a veces los encontramos bien arriba y en otras hasta el metro y medio de profundidad. A fondo salen bogas y carpas, y con mojarreros y cucharas, cabezas amargas. Aquí la pesca es tanto en el modo convencional como en spinning y fly. Además se pueden alquilar kayaks y practicar paintball. El predio cuenta con baños y bar.
En el número de febrero de revista Weekend primiciamos la apertura de este coto de pesca de tarariras cercano a San Miguel del Monte. El guía Cristian Battegazzore lleva pequeños contingentes y deja descansar el ámbito un par de días tras cada visita. El punto de encuentro es una estación de servicio por Ruta 41 cerca de la Ruta 3, desde el cual se sigue al guía hasta el predio. La pesca de tarariras es óptima en tamaño y cantidad y se puede practicar tanto al vadeo en ámbitos bajos como desde la orilla en sectores profundos con el pasto corto. Ideal para ir con niños y familia. Esta variedad de espejos nos obliga a contar con señuelos de superficie y subsuperficie, así como con algunos de paleta que nos permitan trabajar a media agua. El flycast es la otra opción de pesca y no se admite la actividad con carnada natural. Solo con devolución.
Los Tigres
Esta cava devenida en pesquero est á cosecha ndo los frutos de una siembra de pejerreyes hecha hace seis años. Abrió sus puertas a mediados de 2019. Se llega desde Buenos Aires por la Ruta 2 hasta la 215, de allí a Coronel Brandsen, donde tomamos la 210 hasta el Km 65,5, donde está el caminito de ingreso a laguna Los Tigres. Luego de que la cava fuera inundada con aguas surgentes, le sembraron pejerreyes. Es un lago pequeño, fácil de recorrer a pie, pero con una profundidad de hasta 15 metros en su parte central. De aspecto muy pintoresco, aguas cristalinas, un pequeño muelle y con una cabaña y huerta orgánica