10 clásicos engañadores.
Un repaso por los señseñuelos más populares de la Argentina, esos que marcaron la histohistoria de la pesca en nuestro país.
Un repaso por los señuelos más populares de la Argentina, esos que marcaron la historia de la pesca en nuestro país.
Nos sorprende la gran cantidad de señuelos expuestos en una buena casa de pesca. Treinta años atrás apenas se podían contar con los dedos de las manos. Y como tenemos diez dedos, vamos a recordar a los diez artificiales más famosos, más usados, por los pescadores argentinos en otros tiempos. La elección es arbitraria. Influyeron mis tres décadas de periodista y la investigación y lectura en viejas revistas de pesca. Como toda elección deja afuera otros modelos, incluso algunos de carácter regional como las cucharas CAT (Carlos Alberto Trejo) en el río Dulce y su embalse. El orden también es aleatorio.
1. Z-ondulante
Roberto Zapico Antuña fue uno de los más importantes periodistas de pesca y el que más trabajó sobre señuelos en la Argentina. Dejó innumerables artículos en revistas especializadas y clásicos libros, como Spinning, pesca calificada, además de esta cuchara de su creación. Luego de perder muchas cucharas buscando el equilibrio entre un señuelo chico y el peso suficiente para lanzar, se inspiró en la norteamericana Limper, que se caracterizaba por el anzuelo loco y la asimetría entre sus partes.
Luego, le amplió el ancho para aumentar el planeo de la ondulación y le hizo dos nervaduras longitudinales para acrecentar la resistencia ante la fuerte mandíbula del dorado, su principal destinatario. El autor decía que, por ser ancha, costaba arrojarla contra el viento y en las correderas muy rápidas había que recogerla muy despacio, porque tendía a girar. Le gustaba su gran acción, incluso cerca de la costa cuando la correntada suele ser menor, y también la valoraba como cuchara muerta, es decir, cuando comenzaba a hundirse no bien caía al agua. Una vez que tuvo el modelo terminado, la entregó a la fábrica Esimar para su elaboración y venta. Corría la década de 1960. Originalmente usaba un anzuelo simple Mustad 3813 o Eagle Claw de Wright & Mac Gill, en ambos casos, 8/0.
2. Flatfish
El citado Zapico Antuña utilizaba en sus pescas en agua dulce, tanto de truchas como de dorados y hasta algún pacú, este señuelo que fabricó Helin Tackle Co, en Detroit, Michigan, Estados Unidos, desde mediados de la década de 1930. Se patentó en 1936. Charles Helin fue el creador. Se los vendía en cajas de cartón con un pequeño folleto, donde traía un bosquejo del señuelo y una explicación de cómo usarlo en baitcast y trolling. Se llegaron a vender en diecisiete medidas: dos pequeñas (casi para mosca), ocho para spinning y siete para baitcast y trolling. Por entonces se ofrecía en 32 colores y cuatro más adicionales, solo para determinados modelos. Además venían con distinta cantidad y disposición de triples: dos adelante más dos atrás, dos adelante más uno atrás y dos atrás más uno adelante. En 1949 Helin festejó los cinco millones de Flatfish vendidos; en 1958, fueron veinte millones.
3.Toby
En Svagnsta, a orillas del sueco uec co río Morrum, nació la casa Abu u en n 1921. Carl Borgstrom, su propietaeta- rio, la dedicó a la construcción de relojes, especialmente para taxis. xis. Al final de la década de 1930 comenzó a proyectar reeles de pesca sca y en 1941 dio a conocer al público ico su primer modelo. Gote, el hijo del dueño, era un pescador fanático ico y fue volcando la actividad fabril bril hacia los reeles.
En 1957, introdujo al mercado do esta cuchara de bronce, larga, ga, ideal para los ríos salmoneros os ded de aguas rápidas de Escandinanavia. Su éxito fue tal que tuvo o muchas imitaciones en todo o el mundo hasta nuestros días, s, como la Evy y la Tybo. Toby see se convirtió en un nombre generalista ta para las cucharas que tienen este formato.
En 1980, Abu compró y se fusionó con la firma norteamericana que distribuía desde hacía tres décadas sus reeles en los Estados Unidos: Charles García. Desde entonces se la conoce como Abu García. En la Argentina fue muy apreciada para la pesca de truchas y dorados. La empresa sigue produciendo algunas ondulantes clásicas, como este modelo y los Atom, Plankton, Hammer y Zeppo.
4. Bass-Oreno
South Bend, de los Estados Unidos, introdujo al mercado este señuelo en 1915, aunque quizá unos años antes ya estaba disponible al público. Se basó en una patente presentada por J. S. Olds. Hecho en madera, le fueron haciendo pequeños cambios con el tiempo, por