En Tigre algunos bares ya piden certificado de vacunas a clientes
Aunque el resto de la Provincia aún no aplicó la medida, en el distrito ya rige. Gastronómicos, con opinión dividida.
Desde esta semana en bares y restaurantes del municipio de Tigre comenzaron a solicitar el certificado de vacunación a los clientes que ingresa comercios gastronómicos. De esta manera, las personas no solo deben llevar encima la billetera, documentos y barbijos, sino también el comprobante de vacunación o la inscripción confirmada en la aplicación Vacunate PBA. La medida tiene como objetivo prevenir contagios de Covid19.
Tal como anunció el intendente Julio Zamora, el distrito de zona Norte del Conurbano se adelantó y amplió un proyecto que la Provincia anunció para todo el territorio.
Algunos negocios empezaron a solicitarlo el lunes, fecha pautada por las autoridades para llevar a cabo esta medida sanitaria, mientras otros se adelantaron y arrancaron el fin de semana con el objetivo ampliar la capacidad de clientes en espacios cerrados y empezar a acostumbrar a los consumidores y trabajadores.
Vivanco, un restaurante ubicado en el centro de Tigre, fue el primer comercio en implementar la medida desde el sábado y el gerente, Edgardo Martiarena, fue uno de los responsables en armar el convenio para solicitar el "pase sanitario" y controlar el ingreso de los clientes.
"Lo que no ayudó mucho este fin de semana fue el clima, pero no la medida sanitaria porque recibimos un montón de gente y el restaurante tuvo el movimiento habitual", explicaron desde el local.
Las personas pueden mostrar el certificado a través de fotos, aplicaciones - en "Mi Argentina" figura junto al DNI y a la licencia de conducir para quienes la tengan cargada- o también el comprobante sanitario de manera física, el cual es entregado luego de la inoculación.
"En nuestro caso, la idea es que el cupo interno esté ocupado en su mayoría con personas vacunadas. Como es muy difícil constatar un porcentaje exacto de cuánta gente recibió al menos una dosis, Tigre decidió pedir el certificado a todos y aumentar el nivel de seguridad en el local", explicó Martiarena.
De esta manera, recalcó que todos los clientes que estén dentro del restaurante van a sentirse seguros no solo porque estarán rodeados de personas vacunadas sino también porque pasaron la "prueba" sanitaria para permanecer allí. "Es una medida para respetar al personal y a los clientes", agregó.
Si bien desde el Municipio anticiparon que quienes incumplan esta medida tendrán sanciones económicas, los comercios gastronómicos son los responsables de hacer el seguimiento. "Es un acuerdo de colaboración para hacer el destino más seguro, pero no creo que haya inspecciones de control", añadió Martiarena.
Sin embargo, en otro de los comercios de la zona norte del GBA, la normativa llegó acompañada del "miedo" de perder clientes y de que mucha gente deje de asistir al local por no estar vacunado. Por esta razón, aún están evaluando cómo implementar la medida.
"Todavía estamos esperando que nos pasen los puntos claves así sabemos cómo accionar y qué controlar. Además tememos perder clientes, por eso nos encontramos a la espera de saber cuales son las condiciones", detalló preocupado el encargado de María Luján. Y añadió: "Queremos ver de qué manera vamos a implementar el protocolo porque después del año que vivimos y las dificultades que sufrió el rubro la idea no es que nos perjudique".
Por el momento, en este restaurante, continúan trabajando de manera habitual. La capacidad para la parte interna es del 30%, mientras que en el exterior las mesas se encuentran a una distancia de 1,5 metros.
Hasta el momento, el plan que tienen el resto de los municipios del GBA es ampliar progresivamente el aforo para personas que se hayan vacunado con la primera dosis de vacuna. Si antes sólo podía tener un aforo del 30% o 50% (según la fase epidemiológica de los distritos donde se encuentren), ahora podrán sumarle a eso un 20% adicional de vacunados. ■