Valentina Podestá La gimnasta a la que Portugal le cae bien
Tiene 16 años, es de Ituzaingó y en ese país ganó por cuarta vez medallas en trampolín. La entrena su papá.
Toma carrera, hace una respiración profunda y va por todo. Unos segundos después, el aire se llena de aplausos. Parece una escena que se repite habitualmente en Portugal. La gimnasta de trampolín Valentina Podestá se consagra y rompe un récord: ganar medallas en los cuatro torneos grandes de ese país.
Así recuerda Valentina el momento que vivió hace un mes y medio atrás. Si bien ya se había subido al podio en este torneo, la vecina de 16 años sigue asombrada: “Sabía que era capaz de ganarlo, pero cada vez que lo logro me vuelvo a sorprender”. La joven de Ituzaingó es especialista en esta disciplina deportiva donde la acrobacia es protagonista. Saltos, giros y velocidad, todo en una serie de ejercicios en aparatos elásticos.
Así la campeona logró repetir lo hecho años anteriores en tierras lusas. En 2016 se alzó con la plata en Santarem y el oro en el torneo de Coimbra. En 2018 obtuvo el segundo puesto en la competencia de Loulé; y ahora el oro en Cascais en las categorías individual y en Doble Minitramp Junior Femenina.
La clave de todo es que la gimnasia de trampolín corre por las venas de la familia Podestá. Valentina comenzó a practicar a los seis años y desde entonces comparte el deporte con su hermana Delfina, hoy ambas entrenadas por su padre. “Ella es mi compañera y me apoya en todas. Y mi papá siempre sabe qué decirme en los momentos difíciles. Él me mostró este deporte y desde los ocho me entrena”, dice.
Ahora con la confianza bien alta, la campeona espera llevar su racha a toda la península ibérica, cuando empiece a preparase para el circuito de Copas del Mundo de Trampolín en suelo español. ■