Liberaron ocho zarigüeyas en la Reserva Natural de Ituzaingó para protegerlas de otros animales
Los ejemplares, también conocidos como comadreja overa, fueron trasladados al predio junto al Río Reconquista.
En Ituzaingó, una vez más, dieron otro paso al frente en lo que respecta al cuidado y conservación de la fauna silvestre. Es que hace unos días, un grupo de trabajadores de la Comuna de ese partido de la zona Oeste del Gran Buenos Aires trasladaron y liberaron en una reserva a casi una decena de comadrejas que se encontraban en una situación de potencial peligro.
En ese sentido, parte del equipo de la subsecretaría de Ambiente y Desarrollo Sostenible e integrantes de la Dirección de Zoonosis local se encargaron de efectuar “la translocación
de ocho ejemplares de comadrejas overas, Didelphis albiventris” en la Reserva Natural Urbana Río Reconquista, ubicada en el gran predio emplazado en la avenida Martín Fierro y la autopista Camino del Buen Ayre, en la localidad de Villa Udaondo.
Según informaron desde la Comuna, se tratan de ejemplares nativos propios, nacidos en el distrito, y fueron transportados desde un establecimiento próximo a la Reserva local “por encontrarse en situación de potencial peligro, debido a lo que se denomina conflicto de fauna urbana”; situación que impedía garantizarles seguridad y bienestar. Por ese motivo, era imperioso trasladarlas a la naturaleza silvestre y terminar estableciendo el mencionado espacio verde como su nuevo hogar.
Las comadrejas overas -o zarigüeyasson marsupiales nocturnos que forman parte de la fauna silvestre urbana y están adaptados a la vida arborícola. Durante el día descansan en los huecos de los árboles o en sus madrigueras y por la noche salen a buscar sus alimentos.
Cuentan con un menú variado: roedores, insectos y frutos, por lo que son consideradas controladoras de plagas y dispersoras de semillas; además de cumplir un rol fundamental en el equilibrio del ecosistema.
Si bien no se tratan de animales agresivos ni representan un peligro para la fauna doméstica -como perros o gatos- no son mascotas ya que, como gran parte de los animales silvestres, son eventuales portadoras de enfermedades que pueden ser transmitidas a los seres humanos.
Tras la liberación de las comadrejas,
desde el Municipio de Ituzaingó salieron a pedir que, ante cualquier acción indebida en perjuicio de esa especie, los vecinos y vecinas del distrito contacten a las autoridades pertinentes para poder intervenir en una eventual circunstancia.
“Son animales silvestres, por lo que se encuentran protegidos por la Ley de Fauna Silvestre N° 22421 que prohíbe su captura, venta o domesticación. En caso de observar un ejemplar encerrado o herido las y los vecinos pueden comunicarse con la subsecretaría de Ambiente y Desarrollo Sostenible de lunes a viernes de 8 a 15 al (número de teléfono) 5068-9308”, señalaron.
Además de la liberación de las ocho comadrejas, hace unos días la Comuna también protagonizó la recuperación y posterior devolución a la naturaleza de un gavilán mixto.
Junto al Club de Observadores de Aves de Pecho Colorado, el área de Medio Ambiente local logró liberar a un pichón que había sido encontrado en muy mal estado en el jardín de la casa de Rosa Paladino, una vecina del distrito, quien dio aviso del descubrimiento. “Estaba en el patio, muy malherido en una de sus patas y en las alas, algo que le complicaba llegar a su alimento diario”, cuenta la mujer, que incluso temió por la vida del ave rapaz ya que sus perros-amenazaban con atacarlA. Finalmente, luego de una extensa recuperación, que demandó casi nueve meses y estuvo compuesta por tres etapas, el animal volvió a desplegar sus alas y alzar vuelo en el mismo predio en el que las comadrejas overas encontraron su nuevo hogar hace unos días.w