Oscar Belondi, el cumbiero que desde hace 20 años hace bailar a la movida tropical
Comenzó como cantante de Yerba Brava y en 2003 formó La Repandilla. “La gente es increíble: hay equipos de fútbol con el nombre del grupo”, dice.
Corría diciembre de 2003 y Oscar Belondi (44) ya había dejado de ser aquel vecino del barrio La Reserva que se ganaba la vida vendiendo broches, bolsas de residuos y desodorantes ambientales por las calles de La Matanza.
Por ese entonces, la popularidad que supo cosechar tras su brillante ciclo como cantante de Yerba Brava también le había permitido prescindir del trabajo de barrendero que realizó unos años antes para abocarse, íntegramente, a la producción de sus invenciones musicales, 'La Base' y 'Eh!!! Guacho', que llegaban para renovar -una vez más- a la movida tropical.
En paralelo y debido a la relevancia que obtuvo al frente del icónico grupo, que fue uno de los pioneros de la denominada 'cumbia villera', el carismático hombre nacido en San Justo en el seno de una familia muy humilde, se encontró con otro desafío artístico que lo tenía -de nuevocomo atracción principal, ya que un manager de su antigua banda le ha"Fundaron conseguido presentaciones en boliches pese a que había colgado provisoriamente el micrófono.
"Me llamó diciéndome que tenía shows para mí, y tuve que improvisar un grupo con amigos más algunos músicos de Yerba Brava que también se habían ido. No estaba proyectado, yo no tenía como idea salir con un grupo. Entonces, nos pusimos a ensayar y a ver qué íbamos a hacer, porque queríamos salir a tocar haciendo algo distinto. Fue medio de rebote", recuerda Belondi sobre el nacimiento de La Repandilla, su exitoso proyecto que ya lleva 20 años de vigencia y continúa convocando cada fin de semana a miles de personas en diferentes puntos del Conurbano, del país y también del exterior.
El renovado vestuario, dejando de lado la indumentaria deportiva para pasar a lucir un look algo más formal; la implementación de instrumentos de viento, como trompetas y saxos para contrastar con los sonidos del teclado; y la presencia de 15 músicos en el escenario fueron los factores que terminaron dándole el nombre al conjunto.
"Fue una mezcla medio rara, porque
usábamos tiradores y moños y éramos una banda numerosa. Funcionó, se nos abrieron muchas puertas y la cosa ya no paró. Al menos, hasta hoy", dice el vecino de Isidro Casanova, localidad en la que reside y en la que incluso montó su propia productora musical, 'Parulo Records'.
Chaco, Misiones, Tucumán y Santiago del Estero fueron testigos
recientes de la validez que 'La Repa' (apodo con el que se conoce popularmente a la banda) ostenta en la movida. Muy poco cambió, en materia de convocatoria de fanáticos, desde aquella ocasión en que la banda se presentó por primera vez y hace dos décadas en 'Poupee Bailable', un extinto boliche de Lomas de Zamora. Los fans siguen siendo fieles a la banda.
equipos de fútbol con el nombre del grupo, nos pintan murales en sus barrios y se tatúan estrofas de canciones. Es increíble. Son cosas que nos vamos a llevar en el corazón por siempre. Hay un cariño súper especial por nosotros que no se puede pagar con nada. De Ushuaia a La Quiaca nos tratan con mucho cariño", dice el creador de La Repandilla, quien admira profundamente al mítico Antonio Ríos.
Hace unos días, La Repandilla tenía previsto presentarse en el Interior, Conurbano y la Ciudad de Buenos Aires, pero por cuestiones de salud de Belondi sus shows se postergaron hasta febrero de 2024. Y con justeza: hace unos años, el cantante fue sometido a una ablación cardíaca y ahora, por recomendación médica, debe resguardarse un tiempo.
"El cardiólogo me obliga a parar por unos meses. Es mejor prevenir que curar", aclara. Y también revela cómo su grupo vive las giras: "Cada viaje nuestro es como uno de egresados, pero de jovatos. Nos reímos y los disfrutamos mucho", cuenta. Así, no habrá tiempo para celebrar ni los primeros 20 años de la creación del grupo ni los de la publicación del primer disco, 'KaKa Nene', que se lanzó a principios de 2004.
"La Repandilla nos permite abrir un abanico de canciones, como para que la gente pueda tener un poco de todo y no solo cumbia base o villera, sino también testimonial, clásica y colombiana. Tratamos de complacer al público en general y adaptarnos a las nuevas generaciones, pero sin irnos de nuestro estilo", agrega.
Desde su creación y hasta 2011, el grupo sacó cuatro discos. Luego, con el avance de la tecnología y el sólido desembarco de la distribubía
“Nos pintan murales en sus barrios y se tatúan estrofas de canciones. Son cosas que nos vamos a llevar en el corazón por siempre”.
ción digital, se abocó a la promoción de canciones -que en las plataformas acumulan cientos de miles y hasta millones de reproduccionesa través de sus propias redes sociales y los canales de Youtube de la banda y de Parulo Records, que ofrece ese tipo de distribución, estudio y horas de grabación, cámaras, y espacios para realizar streamings y videos.
"Es mágico lo que pasa con La Repandilla, pero no veo más allá. No sé a dónde me va a llevar todo esto, pero sí tengo bien en claro de dónde vengo", concluye el líder de la banda matancera que cumple 20 años de vigencia.w