Estrenaron los nuevos refugios de colectivos frente a la UNLZ
Los estudiantes de la Universidad de Lomas de Zamora y vecinos de las inmediaciones de la facultad se encontraron con una novedad en la parada de colectivos de Juan XXIII, justo delante del ingreso al predio universitario: un nuevo sistema de refugios que, además de tener un aspecto renovado, cuenta con algunas funciones extra.
El refugio tiene asientos, techo y señalización, con carteles que indican los recorridos de las líneas y, además, cargadores para celulares y tablets a través de puertos USB instalados en los postes.
“Me pareció una buena iniciaiva. Muchas veces pasa que después de estar cursando, al final del día, ya te queda poca batería en el celular y de este modo, mientras esperás, podés enchufarlo para recargarla, me parece una medida interesante”, opinó Julián, estudiante de Derecho en esa Universidad.
También buscan mejorar la seguridad de la zona con una mejor iluminación: toda la parada tiene un circuito de LED instaladas que emiten una luz mucho más potente que la que había en ese lugar. “Eso es clave porque ahora anochece muy temprano y ya cuando salimos de cursar está totalmente oscuro. Esperar el colectivo en la penumbra realmente era un gran riesgo y había varios casos de robo”, cuenta Catalina, estudiante y ayudante de un docente en la universidad.
Esa zona fue un punto de conflicto en lo que a pedidos de obras se refiere y aún siguen los trabajos para mejorar el acceso. La renovación integral de Juan XXIII viene desde 2017, cuando los estudiantes de la Facultad presentaron una serie de reclamos debido al estado de ese acceso y del Camino de Cintura. Eso devino en una batería de trabajos de bacheo, fresado, ensanche y repavimentación generalizada en ese circuito tan utilizado por la comunidad educativa y los vecinos, pero que tenía serias falencias.