La distancia no les impidió unirse para hacer canciones y ayudar a un comedor
Un baterista de Lanús convocó a amigos de Longchamps, Ezeiza y otros lugares del mundo. Grabó cada uno en su casa.
La música no tiene límites ni fronteras. Cuando están las ganas, no hay pandemia que la frene ni coronavirus que la silencie. La solidaridad tampoco.
"Palabras al viento" se titula una de las canciones -el "corte de difusión" se diría- del proyecto Desparramadxs, una iniciativa solidaria surgida de la idea de un baterista de Lanús. El proyecto busca ayudar al Comedor Nueva Vida. Y participaron en él más de 20 artistas de Lanús, Ezeiza, Longchamps y mucho más allá: desde Misiones, Paraguay y España se sumaron a la movida.
"Esto arrancó gracias al contacto que tengo con amigos que viven en Barcelona y Tenerife. Fruto de la inquietud por la pandemia surgió la idea de hacer una canción a distancia entre los tres: Pablo Ledesma desde Barcelona, Lucas Sánchez de Tenerife, y yo de Lanús. Después se fue sumando más gente", cuenta Joaquín Amitrano, el generador de la idea.
La otra punta del proyecto vino también a causa de la pandemia. Joaquín y su banda tenían previsto un show a beneficio del Comedor Nueva Vida, de Lanús, y por las medidas sanitarias debieron suspenderlo. "Se me ocurrió que si difundíamos la canción y el video junto a los contactos y la cuenta bancaria que utiliza el comedor, podríamos dar una mano. Al menos, si no conseguíamos otra cosa, haciendo un poco más visible su situación y necesidades", explica.
En Nueva Vida, ubicado en Gobernador Ugarte 3926, Remedios de Escalada, comen 120 chicos, de lunes a viernes. "Estoy muy agradecida por todo lo que hacen, cualquier ayuda es muy importante para nosotros. Nuestros chicos saben del proyecto de Desparramadxs y escuchan las canciones, tenemos un grupo de WhatsApp donde las compartimos", cuenta Estela Brandan coordinadora general del comedor.
El videoclip de "Palabras al viento" esta filmado en locaciones de
Longchamps, Misiones y Paraguay. Contiene imágenes de un viaje que los realizadores, Juan Rodríguez y Romina Bonzi, hicieron un tiempo atrás.
"Coincidíamos en que esta tarea nos metía en algo para sobrellevar la situación de estar, de alguna manera, desocupados. No quisimos apelar al recurso de hacer versiones de temas famosos ni dar golpes bajos en las imágenes del clip", dice Joaquín.
Las grabaciones se fueron realizando de manera artesanal, con lo que cada uno tenía en su casa, lo mismo que la mezcla. "Obviamente, no le exigimos a ninguno de los músicos que dispusiera de alta tecnología para participar. Todo pasa por una cuestión de ingenio", asegura el músico. "De todas maneras -agrega-, ya se ofrecieron amigos que tienen estudio de grabación para procesar el material que vaya saliendo, y otros realizadores visuales que tambien aportarán lo suyo a la hora de ponerle imágenes a las canciones".
La composición de cada tema (en desparramadxsxelmundo. bandcamp.com se pueden escuchar cuatro) también se hizo "vía satélite" y de manera grupal. "Generalmente les envío las bases rítmicas a colegas que escriben letras y componen sus propios temas. Hasta ahora surgieron canciones bastante introspectivas o críticas de la situación. Por supuesto, son libres de escribir lo que quieran" explica Joaquín. "La cuarentena va a pasar, pero las canciones quedan -se entusiasma-. Me gustaría escucharlas en un año y seguir sintiendo que hay un reflejo universal y no solo de lo que pasa ahora".
"El proyecto tiene algo de experimental y lúdico en cuanto a lo artístico. Y en cuanto a lo humano, también es destacable que se hayan sumado incondicionalmente sabiendo que el motor es ayudar a gente que no la está pasando bien en este contexto", dice el músico. Y reflexiona: "Estamos desparramados por el mundo...no sé hasta dónde llegara la cosa. Desparramados, como un virus".w