El sacacorchos búho
Der “Uhu-Korkenzieher” ist eine Erfindung aus Spanien. Aber das wissen nicht einmal die Einheimischen.
NNingún tapón se resiste al sacacorchos búho, afirman los gastrónomos. Duro, seguro y fácil de manejar, no hay que ser Hércules para abrir una botella de vino con un búho sin desesperarse y sin dañarse las manos.
Este sacacorchos de doble palanca, de acero, el tanque entre los sacacorchos, no es un invento ni alemán ni americano ni francés ni italiano, sino español, algo que ni los mismos españoles saben, aunque han descorchado con él botellas y más botellas de vino. Tampoco lo saben en el extranjero, a pesar de que llegó a los hogares europeos antes que a los españoles. Todavía hoy, el 95 % de las ventas de la empresa BOJ, que tiene la patente del modelo y lo comercializa, tiene lugar en el exterior.
Fue el industrial vasco David Olañeta, hijo del fundador de la empresa BOJ, quien creó en 1932 el mítico sacacorchos. La empresa BOJ, dedicada al diseño de ferretería, está en Eibar (Éibar en español), una ciudad del País Vasco, que fue un importante centro del desarrollo industrial en España.
Modesto como la fregona y el chupa-chups, otros “grandes” inventos españoles, el búho ha hecho historia y es uno de los objetos más importantes del diseño industrial español. Ha estado expuesto en numerosos museos, en 1998 en el Museo Reina Sofía, y está incluido en la colección de objetos del MoMA.
Hoy se encuentran en el mercado modelos más sofisticados, que han desbancado al búho. Pero cuando las botellas de vino se descorchaban con un artilugio en forma de T que acababa con la paciencia de muchos, el diseño de David Olañeta supuso una importante mejora para los amantes del vino.