Joaquín Sánchez. El artista que teje lo destejido
El pintor ve su arte como una producción cinematográfica, una obra que tiene principio y fin.
El artista y curador de arte Joaquín Sánchez presenta en abril, en la galería Mérida Romero de La Paz, una muestra monográfica con objetos artísticos, performance, fotografía e instalaciones. Se trata de una exposición de su universo e investigación constante, procesos relacionados al arte indígena, popular y contemporáneo.
El artista que ha expuesto en casi todos los países de Latinoamérica y Europa, cuando habla de su trabajo, señala que siempre empieza desde una imagen aunque ella sea una palabra.
“De niño, fui ayudante del cine ambulante de mi abuelo que recorría las comunidades rurales del Paraguay”, relata Sánchez, quien convivió con comunidades indígenas en Paraguay y Bolivia, en particular la guaraní.
“Desde entonces tengo una conexión muy profunda con la imagen en movimiento. Mi proceso de trabajo es como la creación de una película desplegada aunque la obra final termine siendo un objeto o una escultura. Los objetos están siempre cargados de una memoria casi física”, detalla.
En cuanto a la temática de su trabajo, el artista afirma que le interesan las crónicas familiares, la memoria personal y los pequeños relatos que migran hacia los relatos colectivos.
“Me gusta borrar para reescribir y destejer para volver a tejer y así cambiarle el final a las historias. Es abrir algo sellado para resignificarlo, transformar un mito que desaparece y convertir el soporte en un palimpsesto que retiene las huellas de la escritura original”, comenta.
También afirma que sus obras surgen de algún tipo de conflicto, político- social- cultural y personal formulado a través de un relato.
“Me interesa redibujar los espacios fronterizos donde conviven distintas herencias y temporalidades, como el paisaje omnipresente, el mundo ancestral, el suceso bélico y sus implicaciones presentes”.