Municipios apoyan Rositas, pero critican fallas en socialización
Los indígenas guaraníes de Tatarenda Nuevo y Yumao presentaron una acción popular contra el proyecto
Los alcaldes de Cabezas y Gutiérrez, municipios afectados por el proyecto Rositas, coinciden en que hay errores en la socialización que lleva a cabo la Empresa Nacional de Electricidad de Bolivia (ENDE) pero que eso no significa un rechazo de la hidroeléctrica, pese al recurso de acción social que interpusieron dos comunidades guaraníes.
Rodolfo Vallejos, alcalde de Cabezas, donde se tiene planificado construir la presa, aseguró estar de acuerdo con la ejecución del proyecto, sin embargo, dijo que existen muchas quejas por parte de las comunidades directamente afectadas porque hasta la fecha desconocen las alternativas de compensación, así como los lugares donde serán trasladados.
La autoridad municipal mencionó que existe falta de coordinación en el proceso de socialización, puesto que, por ejemplo, actualmente se construye un puente —con recursos de la Gobernación de Santa Cruz— en un lugar que quedará inundado.
Por su parte, el alcalde del municipio de Gutiérrez, que aglutina a las comunidades de Tatarenda Nuevo y Yumao, indicó que si bien existen quejas del proceso de socialización que lleva a cabo la empresa estatal, aclaró que este municipio no se opone a la ejecución del proyecto, sobre el cual destacó sus beneficios.
Taborga anunció que la relación entre su municipio y ENDE ha sido buena desde el inicio del proceso de socialización, hace más de un año, y como parte de ese trabajo coordinado tiene planificada una audiencia la próxima semana.