Destacan que capitales extranjeros miren a empresas de Cochabamba
Los empresarios privados, economistas y trabajadores de Fino resaltaron la llegada de inversiones privadas al departamento, porque evidencia la eficacia de este sector
A 22 días de la declaratoria de emergencia de la Confederación de Empresarios Privados de Bolivia (CEPB), que generó tensión con el Gobierno central por el incremento salarial, el anuncio del pago del doble aguinaldo y la promulgación de la Ley de Empresas Privadas, la gerencia de las Industrias de Aceite S.A. (Fino) informó el jueves que vendió el 100 por ciento de sus acciones a la empresa peruana Alicorp S.A.A.
Los economistas, empresarios y trabajadores consultados por este medio valoraron la medida, porque consideran que responde al desempeño de las firmas cochabambinas que despiertan el interés de inversionistas extranjeros en el país.
Con la venta de la aceitera, al menos cuatro empresas locales fueron transferidas a compañías extranjeras desde el 2007. Esto resalta la capacidad del sector empresarial del departamento, pese al clima de negocios adversos de los últimos cinco años a causa de la promulgación del segundo aguinaldo en 2013.
Ante este hecho, el presidente de la Federación de Entidades Empresariales de Cochabamba (FEPC), Javier Bellot, destacó que inversionistas del exterior del país fijen su atención en los emprendimientos locales, ya que es un indicador de que el sector está mejorando bastante. Sin embargo, enfatizó que los inversores, que se adjudican con las acciones de una empresa en el país, tienen la labor de potenciar la producción y productibilidad social.
“Estas empresas deben tener una visión altamente dinámica para hacer una compra productiva, lo ideal es que estos actores tengan una actitud agresiva en cuanto a inversiones para potenciar la producción y productibilidad social. Este nuevo actor (Alicorp S.A.A.) debe venir con más ímpetu y audacia, con ganas de invertir”, señaló Bellot.
A su turno, el economista Pablo Cuba enfatizó que la venta de Fino a una empresa del exterior es positiva, ya que ésta es catalogada como una de las industrias más antiguas y dinámicas que generó muchos empleos.
“El impacto siempre es positivo. Estudio las experiencias de Perúy chiley hanalzadomucho sus economías por la presencia de inversionistas, se consolidan y el impacto económico es alto”, expresó el analista.
De esta manera, explicó que en los últimos 10 años, además de Fino, tres empresas locales vendieron sus acciones a accionistas extranjeros: Manaco, Taquiña y Pil.
Asimismo, dijo que esta acción abre la puerta a que más compañías consigan inversionistas y también es una gran oportunidad para las micro y pequeñas empresas (Mypes).
Por otra parte, el economista Alberto Bonadona dijo que en Bolivia existe la necesidad de una ampliación de empresas internacionales y que las nacionales están empezando a confiar en estas compañías. Sin embargo, manifestó que se verá si la venta de Fino es positiva o negativa con las acciones que realicen a futuro.
Ante el anuncio de la venta de la aceitera, los trabajadores vivieron un momento tenso, porque temían que sus empleos se verían afectados con la nueva administración, según informaron algunos de ellos a este medio.
“Es un ambiente organizado, con un gran equipo, espero no hayan cambios”, dijo uno de ellos.