Agradecer ayuda a vivir plenamente

Cultivar la gratitud no sólo ayuda a sembrar bienestar emocional y a regular el estrés, también tiene repercusiones positivas sobre la salud física

pertar logrando un mejor ánimo.

• Permite crear coherencia entre corazón-cerebro.

• Me j o r a e l s i s t e ma inmunológico.

• Mejora la vinculación con el mundo, reduciendo la sensación de soledad.

• Refuerza las relaciones interpersonales.

• Aumenta los estados de felicidad y alegría.

• Reduce el sentimiento de carencia.

¿CÓMO PRACTICARLA?

Medina manifiesta que la gratitud puede ser cultivada de una forma positiva: lo que escribes en un cuaderno personal puede convertirse en un hábito que te hará vivir plenamente. Para ello aconseja los siguientes pasos:

Al despertar, agradece por el nuevo día y estar vivo para disfrutarlo. Recomienda iniciar agradeciendo el más mínimo detalle: desde la cama que te permitió el descanso, hasta la luz del sol y el aire que respiras.

Escribe notas de agradecimiento. Dedicadas a ti por algo que hayas logrado o no. A tu familia, a tu esposo o esposa por eso que hizo para ti (que va desde preparar un desayuno, hasta reparar algo que ya no se usaba) o escribirle una nota a quien siempre te ha prestado un servicio. “Cualquier motivo es suficiente para agradecerle a otra persona. Alegrarás ese instante en sus vidas y en la tuya”, enfatiza.

Inicia un diario de gratitud. Medina aconseja que tomes un cuaderno y/ o libreta, al finalizar cada día, haz una lista de 10 cosas por las cuales estar agradecido, tanto lo positivo como aquello que quizás no salió bien, pero que te deja un valioso aprendizaje. “Agradece todo”, adiciona.

Practica la contempla

Un estudio publicado en abril de 2017 encontró que las personas que experimentan y expresan gratitud reportaron menos síntomas de enfermedad física y mejor calidad de sueño. Los autores argumentaron también que la gratitud contribuye al éxito a largo plazo en las relaciones y el bienestar personal. De acuerdo a el Centro de Investigación de Conciencia de la Atención Integral de la UCLA (Mindfulness Awareness Research Center) expresar gratitud cambia literalmente la estructura molecular del cerebro, mantiene la materia gris funcionando y nos hace más saludables y felices. Otro estudio de 2009, realizado por los Institutos Nacionales de Salud (NIH) en EE.UU, encontró que el hipotálamo se activa cuando sentimos agradecimiento o al realizar actos con una intención altruista.

Un estudio de 2012, publicado en Personality and Individual Differences, indicó que las personas agradecidas experimentan menos dolores y manifiestan sentirse más saludables que otras personas.

ción y meditación. Medina señala que hay que estar en el momento presente para poder ver aquellas pequeñas cosas por qué agradecer. “Párate y observa. Respira profundamente”, detalla.

Devuelve algo de ti. “Estar agradecidos nos hace tan felices y abundantes que ponemos sentir la iniciativa de dar a los demás. Haz algo por otra persona, sé un apoyo”, recomienda la experta.

Antes de dormir, recuerda por qué te sientes agradecido en este día. Haz un repaso de las actividades que hiciste durante el día, respira profundamente, sonríe y di: “gracias”. Medina asegura que así liberas preocupaciones, activas la melatonina ( hormona del sueño) y logras tener un sueño profundo y reparador.