Copa Simón Bolívar, un torneo en riesgo por el coronavirus
Si bien el fútbol puede reiniciar entre agosto y septiembre y los tiempos de organizarlos alcanzan, el tema económico entraña riesgos
La trigésima segunda edición de la Copa Simón Bolívar, que debía desarrollarse desde el pasado mes de abril de 2020, se encuentra en una franca incertidumbre y riesgo de no jugarse por la pandemia de la Covid-19 en todo el país.
La principal limitación puede ser el tema económico para sus 37 participantes: implementar los protocolos de bioseguridad para un fútbol seguro y jugar a puertas cerradas. El hueco financiero hace pensar a más de uno sobre su participación.
Según las estimaciones de costos para implementar los protocolos de bioseguridad, cada club debe invertir 18.000 dólares una sola vez, además de 4.000 a 5.000 dólares mensuales extra para las pruebas y otros insumos, montos que muchas instituciones no poseen en este momento.
En cuanto a la duración del certamen, los tiempos aún son óptimos para cuando el fútbol vuelva a tener autorización de jugarse, probablemente en el último cuatrimestre del año, mas algunas asociaciones aún no definieron a sus representantes.
Antes de la pandemia de la Covid-19, la Asociación de Fútbol de La Paz (AFLP) desarrollaba su campeonato clasificatorio, empero su conclusión quedó en una incógnita por este motivo.
El caso más difícil es el de la Asociación de Fútbol Potosí (AFP), que el 21 de marzo debía iniciar su campeonato 2020 para clasificar a sus representantes, pero no lo hizo por la emergencia sanitaria.
Las restantes siete asociaciones departamentales ya tienen a sus tres representantes, siendo Cochabamba la última en sumar a sus planteles el pasado 8 de marzo.
Cuando el mapa se configuraba para completar las 37 plazas, la cuarentena sanitaria obligó a la suspensión de todas las actividades deportivas y sociales, generando que incluso los nueve torneos provinciales departamentales no definan a sus representantes, excepto por La Paz y Chuquisaca que lo consiguieron.
Por ahora, en la División Aficionados de la Federación Boliviana de Fútbol (FBF) analiza lo mejor para este torneo. La idea es que se desarrolle y con los protocolos de bioseguridad. El sistema de torneo, sin duda, cambiará para su disputa. Hasta el 10 de junio se tomarán decisiones.