Los emprendedores locales pasaron ayer un amargo Día Internacional de las Microempresas y las Pequeñas y Medianas Empresas; demandan que las autoridades den más importancia a su labor
El sector de las micro y pequeñas empresas de Cochabamba está entre las más afectadas por los efectos económicos del coronavirus.
Ayer, en el Día Internacional de las Microempresas y las Pequeñas y Medianas Empresas lamentaron la confirmación de fuertes pérdidas. En lo que va de la cuarentena por el coronavirus en Bolivia, unas 150 mypes formales dejaron de percibir al menos 1,5 millones de bolivianos, según datos de la Cámara de la Pequeña Industria y Artesanía de Cochabamba (Cadepia).
La presidenta de esa entidad, Luz Mary Zelaya, alertó que de sus 1.500 afiliados apenas entre el 20 y 30 por ciento pudo reabrir sus empresas en las últimas semanas e indicó que los 12 días de cuarentena rígida serán “devastadores”.
El fantasma de la quiebra ya no es sólo eso, es real. Zelaya señaló que Cadepia recibió la confirmación de que varias pymes decidieron cerrar operaciones, ya que eran insostenibles.
“Muchas empresas no podrán reactivarse”, dijo y pidió al Gobierno reglamentar el acceso a créditos para su sector, tomando en cuenta sus particularidades.
Agregó que las pymes no tienen, por ejemplo, posibilidades de presentar garantías hipotecarias.
Los afiliados de Cadepia solicitaron créditos blandos, con dos años de gracia y el 4 por ciento de interés.
Alto impacto
Las pymes son generadoras de empleo en Cochabamba, pese a que la mayoría son empresas unipersonales y familiares.
Tienen una vasta red de proveedores, dijo Zelaya, principalmente del agro, sector que también está muy perjudicado por la crisis.
Cadepia anima a sus afiliados a volver a emprender, pero es difícil, aseguraron. En un intento de no generar desempleo, algunas mypes han migrado de rubro.
Si antes producían alimentos, ahora se ocupan de hacer barbijos, prendas de bioseguridad y otros productos similares. La desventaja es que han aparecido centenas de este tipo de negocios que incluso necesitan únicamente un carrito para salir y vender.