“Necesitamos un crecimiento inteligente”
Lo que el Estado tiene que hacer es generar instrumentos de políticas públicas que hagan muy caro urbanizar lo agrícola y generar un proceso de densificación urbana, evitando el avance de la huella urbana.
En la actualidad, la huella urbana está sobrepasando las 24 mil hectáreas. El área que está a la espera de la homologación son 37 mil hectáreas, eso es realmente el golpe más bajo que podemos recibir, porque la huella máxima, el horizonte máximo a donde podía haber crecido eran a las 35 mil hectáreas, eso significaba generar un daño muy grande a los acuíferos.
Lamentablemente, este descontrol del avance de la huella urbana y del avasallamiento a las zonas agrícolas está llegando a tocar fondo, porque toda la zona lechera o que provee de alimento fresco para nuestra cotidiana existencia están siendo avasalladas.
Las autoridades deberían sentarse y ver qué es lo más aconsejable, hacia dónde queremos ir. Necesitamos un crecimiento inteligente en Cochabamba que permita la conservación de tierras agrícolas.