Boric asumirá un Gobierno chileno ‘cuesta arriba’
Nuevo ciclo. Los expertos aseguran que una de las primeras tareas de Boric será tranquilizar a los mercados financieros
Sin mayoría legislativa, con una economía que se desacelerará y la tarea de sanar a la sociedad polarizada, el izquierdista Gabriel Boric comenzaba ayer sus gestiones para recibir un gobierno “cuesta arriba”. Además, los mercados reaccionaron a la baja y el dólar alcanzó su mayor cotización.
Sin mayoría en el Congreso, con una economía que se desacelerará y la tarea de sanar a la sociedad tras una polarizada campaña, el presidente electo de Chile, el izquierdista Gabriel Boric, enfrenta un camino cuesta arriba.
Los mercados reaccionaron a la baja ayer tras su triunfo. El dólar alcanzó su mayor cotización histórica a 876 pesos, mientras que la Bolsa de Comercio de Santiago tuvo una caída de 6,18 por ciento en su principal indicador, el IPSA.
El nerviosismo se acrecentó sobre todo por la diferencia de 11 puntos que le sacó Boric al ultraderechista José Antonio Kast, que obtuvo un 44,1 por ciento frente al 55,8 por ciento del diputado izquierdista.
“El mercado en general daba el triunfo de Boric por descontado, pero nadie esperaba que la diferencia con Kast fuera tan amplia”, explicó a la AFP el economista Juan Ortiz, del Observatorio del Con
texto Económico de la Universidad Diego Portales.
Adicionalmente, la participación histórica de votantes (del 55 por ciento) le permiten tener “un mandato totalmente posicionado”, agrega Ortiz.
¿Cuál Boric?
Tildado de “comunista” por
sus detractores por la alianza del Frente Amplio al que pertenece con el Partido Comunista, la gran duda del mercado es saber cuál Boric va a ser el que va a gobernar: el de posiciones más extremas que se mostró en primera vuelta o el más moderado que apareció de cara al balotaje.
“Ésa es la gran incógnita y mientras eso no se transparente, la incertidumbre se va a mantener”, dijo Ortiz.
En su discurso de triunfo, pronunciado ante decenas de miles de personas, el presidente electo afirmó: “Expandiremos los derechos sociales y lo haremos con responsabilidad fiscal”.
“Lo haremos cuidando nuestra macroeconomía. Lo haremos bien y aquello permitirá mejorar las pensiones y la salud sin que haya que retroceder en el futuro”, agregó.
“Que se reduzca esta incertidumbre depende mucho de la persona que sea nombrada en la cartera de Hacienda. No es lo mismo que sea una persona que esté dentro del círculo duro del candidato Boric de la primera vuelta o un ministro que esté en una posición más de centro izquierda”, agregó Ortiz.
Tras reunirse con el presidente Sebastián Piñera en el palacio presidencial, Boric anunció que acelerará una definición de su gabinete.
“Vamos a hacer todo el esfuerzo para que sea lo antes posible”, dijo el mandatario electo, consultado sobre la fecha en que nombrará a sus ministros.
Piñera, en su actual y segundo mandato (2018-2022), nombró a su equipo de ministros el 22 de enero, cerca de un mes después de ser electo.
“Espero no superar ese plazo. Estamos conscientes de que es importante para el país otorgar certezas, que a algunos les pueden gustar y a otros no, pero es importante tener certidumbre de lo que viene”, agregó.
Un Estado de bienestar
Boric, de 35 años, prometió impulsar un “Estado de bienestar”, en uno de los países con mayor desigualdad social, una brecha en el origen del “estallido social” que sacudió al país a partir del 18 de octubre de 2019.
El mayor obstáculo para avanzar con rapidez en las reformas que prometió —como el fin de las privadas Administradoras de Fondos de Pensiones, un sistema universal de salud y 500 mil nuevos empleos para mujeres, entre otras—, es la composición del Congreso que asumirá con él, dividido en partes iguales entre partidos de izquierda y de derecha.
“Gobernar será muy, muy difícil”, dijo a la AFP Michael Shifter, del centro de análisis Diálogo Interamericano en Washington.
“Sanar a una nación”
La participación en el balotaje del domingo (55,4 por ciento según las proyecciones oficiales) fue récord en un país de alta abstención y con un electorado de centro que quedó huérfano de candidatos, cuando Boric y Kast quedaron como rivales.
“Boric tendrá que sanar a una nación”, dijo a la AFP Patricio Navia, de la Universidad de Nueva York.