INTI WARA YASSI EL FUEGO Y LA PANDEMIA ASECHAN EL REFUGIO DE ANIMALES
Losconstantesincendiosenlasreservasforestales que en otrora eran los hogares sagrados y protegidos de los animales, obligan a los pumas, jaguares, monos, osos jukumaris, aves y reptiles, entre otros, a huir a refugios. Uno de estos es la Comunidad Inti Wara Yassi que opera en tres santuarios de vida silvestre en Bolivia: Machía envillatunariencochabamba,ambuearienascensión deguarayosensantacruzyjacjcuisiensanbuenaventura, La Paz.
Actualmente,lostrescentrosalberganalrededorde500 animales. Sin embargo, los dos últimos se ven amenazados cada año por el fuego y todos fueron duramente golpeados por la pandemia del coronavirus, debido a que la atención y cuidado de los animales que llegan a estos lugares estaban a cargo, en su mayoría, de voluntarios que llegan del exterior.
El santuario que está en el parque Machía de Villatunari fue fundado en 1996 como un centro pionero de custodio de zona silvestre en Bolivia con el objetivo de rescatar, cuidar y rehabilitar a los animales silvestres que han sido víctimas del tráfico ilegal, de mascotismo, de los incendios forestales, de accidentes en carreteras o de distintas circunstancias que en su mayoría son ocasionadas por la mano del hombre.
“La misión es devolver una vida digna a estos animales, en el menor de los casos es posible, pero se intenta la rehabilitación, la reintroducción de estos animales a su habitad natural y cuando esto no se puede, porque los animales ya han llegado muy violentados, muy dañados, se les trata de dar la mejor calidad de vida, entendiendo que son animales silvestres y no mascotas”, explica Andrea Benavente, directora de comunicación y relaciones institucionales de la Comunidad Inti Wara Yassi.
A partir de la fundación del Machía empezaron a llegar tantosanimalesqueseviolanecesidaddecrearunsegun
EL NOMBRE USA PALABRAS DE LOS IDIOMAS INDÍGENAS DE LOS TRES
GRUPOS ÉTNICOS PRINCIPALES DE BOLIVIA: “INTI” SIGNIFICA SOL EN QUECHUA; “WARA”, ESTRELLA
EN AIMARA, Y “YASSI”, LUNA EN CHIRIGUANO-GUARANÍ. LA MEZCLA DE LOS TRES IDIOMAS SIMBOLIZA LA
UNIDAD.
do y, posterior, un tercer centro de custodia de fauna silvestre, gracias a donaciones y a una organización del Reino Unido.
Ambueari,enascensióndeguarayosensantacruz,en los últimos años se ha convertido en un área segura como una guarida para una variedad de especies. “Se ha vuelto en un refugio importante, especialmente para jaguares. Tenemos un estudio que se ha realizado hace años con cámaras trampa y donde veíamos que por lo menos 12 jaguares utilizan esta área como su rango de distribución y ese número es altísimo en temas de jaguar”, dice.
Sin embargo, este centro es el que más sufre por los incendios forestales que son ocasionados en la Chiquitanía. Sólo en 2020, por ejemplo, el fuego arrasó más de 400 hectáreas.
“Todos los años recibimos animales víctimas de los incendios, este año hemos recibido un venado, un oso perezoso durante un incendio”, indica.
El centro Jacj Cuisi que está en el norte de La Paz, colindante al parque Madidi, también es amenazado por los incendios. “Lamentablemente, antes cuando fundamos este centro no existía peligro de incendio pues para nada, pero en estos últimos días hemos escuchado de los incendios en Pino Lajas, que está ahí al lado en Rurrenabaque, y también dentro del Madidi; entonces definitivamente el tema de incendios forestales también es un peligro”, señala Benavente.
SIN AYUDA
Cada uno de los centros tiene al menos un administrador, un veterinario, director y coordinadores de área, por ejemplo, en el área de monos capuchinos hay tres coordinadores.elcuidadodelosanimalesrequierededicacióny tiempo, y en todos estos años de existencia de la comunidadhasidoclaveelapoyodevoluntarios,queensumayoríallegandelexteriordelpaís,sinembargo,enlosúltimos meses esta ayuda ha disminuido de forma dramática.
“Tenemos30personasylosvoluntariosvanvariandode parque a parque, lamentablemente desde el tema de los conflictos sociales de 2019 y, luego, pasando por la pandemia, el tema del voluntariado se ha reducido a su mínima expresión, realmente necesitamos muchísima ayuda”.
En anteriores gestiones llegaban voluntarios de Estados Unidos y Europa. La directora de comunicación y relaciones institucionales de la Comunidad Inti Wara Yassi señala que es muy complicado el cuidado de animales. Dice que en el Machía había unos 20 voluntarios, en Ambue Ari eran unos 30 y en Jacj Cuisi, que es el centro con menos animales, trabajaban entre 5 a 10. “Pero ahora los número son reducidos, llegan a 5 voluntarios en cada santuario por suerte y, definitivamente, es un tema que se convierte en un problema mayor”, indica.
Ante esta situación, la Comunidad Inti Wara Yassi ya no rescata y redujo la recepción de animales. “Lamentablemente, ese es el otro problema: se han acostumbrado a dejar animales y que sea responsabilidad del centro que lo tenga. Entonces, esto no es sostenible, que tanto el Gobierno nacional como local siga derivando animales a los centros de custodia y no se les dé ningún tipo de ayuda”.
Agrega que “sin el voluntariado, sin los ingresos debido
a la pandemia, se nos hace imposible seguir aceptando animales, más si no les podemos dar las condiciones que nosotrossabemosqueeslacondicióncorrectaparaaceptar animales. Nosotros no queremos empezar a hacinar animales o tenerlos en malas condiciones o no tener los profesionales necesarios como para cuidarlos. Entonces, definitivamente, ahí también existe una problemática profundísima del Estado que no solo es derivar animales, sinotambiénhacersecargodeellos,tratardedarfacilidades en los centros de custodia”.
Entonces, dice: “Nosotros no tenemos ningún ingreso y el tema de los animales silvestres es una obligación del Estado,espatrimoniodelestado.enesesentido,escomo que el Estado se hace a un lado y deja a estas organizaciones privadas que se hagan cargo de los animales silvestres y no existen recursos que nos den o, por lo menos, algún tipo de ayuda”.
LAS PERSONAS QUE QUIERAN CONOCER MÁS DE ACERCA EL TRABAJO DE LA COMUNIDAD INTI WARA YASSI, QUE QUIERAN APRENDER DE LAS VIDAS SILVESTRES Y VIVIR EN LA SELVA POR UN TIEMPO MÍNIMO DE DOS SEMANAS PUEDEN ESCRIBIR A LA SIGUIENTE DIRECCIÓN: INFO@INTIWARAYASSI.ORG
TRÁFICO Y MASCOTISMO
Según los casos atendidos en la Comunidad Inti Wara Yassi, las aves y monos son las mayores víctimas de tráfico ilegal y del mascotismo. “Los loros, parabas, monos, capuchinos, a veces monos araña, ahí es donde más se concentraelmayornúmerodeanimalesrescatados,también tortugas y hay una infinidad de especies, pero las que más llegan son aves y primates”, afirma Benavente.
Anteestadifícilsituación,remarcaelmensajedequelos animalessilvestresnosonmascotas:“noesbuenotenera un monito encerrado en una jaula o a un jaguar encerrado en una jaula, definitivamente estos animales no solo cumplen un rol biológico en sus ecosistemas, son importantísimos para mantener la salud de los ecosistemas y, por tanto, de nuestro medio ambiente”.
“Los animales silvestres tienen un comportamiento, tienen necesidades innatas que no pueden ser cubiertas por los humanos, el lugar de los animales es la selva, no es tu casa”, concluye.