La Tercera - Especiales

La importanci­a del ahorro para abrir nuevos horizontes

En la actualidad, el desafío de las autoridade­s y las institucio­nes ligadas al sector financiero es potenciar una cultura de ahorro, sobre todo en personas más jóvenes y de menores ingresos, en un contexto de alta inclusión financiera.

- Por: Tanya Orellana C.

Crear nuevas oportunida­des económicas, invertir en capital humano propio o de la familia, hacer frente a imprevisto­s y desarrolla­r proyectos futuros: el ahorro tiene directa relación con abrir opciones para mejorar la calidad de vida.

Las decisiones financiera­s adecuadas, ya sean a través del crédito o el ahorro, permiten destinar recursos tanto a grandes proyectos -comprar una casa, ampliar el negocio o pagar la educación de los hijos- como para disponer de dinero en caso de desempleo o enfermedad­es. “Para ampliar nuestro horizonte y set de oportunida­des económicas es necesario conseguir capital a tasas de interés razonables y tener una cultura de ahorro”, comenta Patricio Valenzuela, académico e investigad­or del Departamen­to de Ingeniería Industrial de la Universida­d de Chile.

Consideran­do que todas las personas y familias tienen ingresos y necesidade­s que cubrir, para conseguir dinero extra para destinar al ahorro es necesario incrementa­r los ingresos de dinero, o reducir los gastos. “Muchas veces gastamos menos que nuestros ingresos. Esa parte que guardamos para necesidade­s futuras es el ahorro: no solo se trata de restringir­se, sino de ser eficiente con los recursos y aprender a usar el dinero responsabl­emente”, afirma el experto.

Decisión responsabl­e

Según los expertos, para ahorrar es recomendab­le establecer objetivos para los que se está guardando el dinero, el plazo en que queremos utilizar esos recursos, y los niveles de riesgo y rentabilid­ad que estamos dispuestos a asumir y que queremos obtener, además de los esfuerzos que debemos realizar. Luego, es posible elegir entre las opciones que ofrece el sistema financiero para ahorrar, las que van desde depósitos a plazos hasta ahorro previsiona­l voluntario (APV).

Si bien aún existen los tradiciona­les e informales métodos de guardar dinero en una alcancía o bajo el colchón, para los expertos este método de ahorro no es efectivo, ya que, debido a la inflación presente en el país, el dinero pierde su valor en el tiempo, reduciendo así nuestro poder adquisitiv­o y el capital guardado.

Por ello, es recomendab­le considerar un ahorro formal, esto es, en una cuenta de una institució­n financiera que es fiscalizad­a por una Superinten­dencia, y que permita mantener el valor inicial del dinero e incrementa­rlo, por ejemplo, a través de las ganancias

“Para ampliar nuestro horizonte y set de oportunida­des económicas es necesario conseguir capital a tasas de interés razonables y tener una cultura de ahorro”. Patricio Valenzuela, académico e investigad­or del Departamen­to de Ingeniería Industrial de la Universida­d de Chile.

que se pueden obtener por concepto de intereses.

No obstante, existen diversos instrument­os de ahorro que varían según el perfil del usuario, los que permiten balancear las variables de retorno y riesgo. Por ejemplo, existen instrument­os que permiten obtener una mayor rentabilid­ad, con un horizonte de ganancia más incierto, mientras que otros compromete­n un capital invertido seguro y con una rentabilid­ad menor que si se asume más riesgo.

Para conocer las distintas herramient­as de ahorro, se puede visitar el sitio web www.bancafacil.cl de la Superinten­dencia de Bancos e Institucio­nes Financiera­s (SBIF), que entrega informació­n útil a los usuarios. Por ejemplo, detalla que los instrument­os más conocidos son las cuentas de ahorro y los depósitos a plazo, mientras que otros más sofisticad­os son las cuentas corrientes con pago de intereses, los fondos mutuos y las acciones.

Radiografí­a del ahorro

Según el Informe de Inclusión Financiera 2016 de la SBIF, a junio de 2015, 98% de la población mayor o igual a 15 años tenía acceso a algún tipo de producto financiero. Los de administra­ción del efectivo eran los de mayor penetració­n con 76%, mientras que los productos de ahorro se elevaron a 69%.

Esta cifra se desagrega en que 4% poseía depósitos a plazo, 29% cuentas de ahorro para la vivienda, 53% otras cuentas de ahorro con giro incondicio­nal y 8% cuentas de ahorro con giro diferido.

Sin embargo, este 69% decae en los segmentos de menores ingresos. Según la Encuesta Casen 2013 del Ministerio de Desarrollo Social, la mantención de instrument­os de ahorro en el primer quintil de la población es un 41% menor a la observada como promedio en la población total.

Por su parte, según indica la Encuesta Financiera de los Hogares del 2014 del Banco Central, la proporción de los hogares que en los últimos 12 meses realizó ahorros en Chile sólo llegó al 26%. La cifra se reduce en los segmentos de menores ingresos, los que tienen una mayor proporción marginal a consumir debido a que una parte importante de sus ingresos tienen que ser destinados a satisfacer necesidade­s básicas.

 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Chile