De vuelta con las pilas puestas
El comienzo del año académico está a la vuelta de la esquina, y con ello, nuevos hábitos deben volver a la normalidad antes del inicio de clases. Con esto en mente, expertos recomiendan incorporar alegría y positivismo al proceso de adaptación e implement
Comenzar el año escolar “con entusiasmo y actitud”, es parte esencial del llamado que hacen diversos especialistas a miles de apoderados y alumnos que ya comienzan a trazar los lineamientos para un exitoso proceso de adaptación durante este 2017.
Al tiempo que el periodo de vacaciones llega a su fin, surgen una serie de recomendaciones y acciones a tener en cuenta para hacer del proceso de reintegración a la enseñanza básica y media, una experiencia más llevadera y positiva.
Por ejemplo, María Francisca Valenzuela, vicedecana académica de la Facultad de Educación de la Universidad de los Andes, aconseja iniciar con antelación el proceso de adaptación con los nuevos horarios, rutinas, panoramas y horarios de comidas, con el fin de evitar dificultades conductuales.
Por ello, plantea que en la última quincena de febrero se introduzcan paulatinamente cambios, los cuales en forma progresiva, ayuden a retomar sin dificultad la rutina del menor.“En este contexto, si un niño deberá levantarse a las 7:00 horas para llegar al colegio, pero durante las vacaciones está despertando a las 10:00 horas, es recomendable que se acueste más temprano y despertarlo algunos días a las 9:00 horas y luego a las 8:00 horas, con el objetivo de que el despertar en el primer día de clases no sea tan fuerte”.
Rol familiar
Por su parte, Ángela Guzmán, directora del Departamento de Pedagogía de la Facultad de Ciencias de la Educación de la Universidad San Sebastián, resalta la importancia que recae en el rol que cumplen los integrantes de la familia en los días o semanas previas al ingreso.
De este modo, aparte de recomendar volver a la rutina escolar cumpliendo con al menos ocho horas de sueño, también enfatiza en “incorporarlos en el proceso de compras del uniforme y útiles escolares, para que, tanto el niño como la familia, vean un ámbito positivo en el proceso de iniciación a clases, en lugar de algo rutinario y aburrido”.
Como conclusión, la académica llama a demostrar entusiasmo ante la nueva etapa escolar que comienza; ser positivo durante todo el proceso; motivarlo constantemente de que volverá a encontrarse con sus amigos y profesores, y también, por todo lo nuevo que aprenderá a lo largo del desafio escolar que se avecina.
Escuchar inquietudes
En tanto, otro punto fundamental es estar alertas y dispuestos a escuchar las inquietudes del niño, respecto del ingreso a un establecimiento nuevo, cambio de curso u otras situaciones que tenga una alta dosis de ansiedad.
La académica Valenzuela, establece que este acto no debe ir de la mano con solo dar un consejo, “sino que muchas veces el menor de edad solo quiere hablar del tema. Si en forma espontánea ello no ocurre, es bueno compartir la propia experiencia y contar por ejemplo, lo nervioso que uno estaba como padre el primer día de clases o el cambio de curso de la enseñanza básica a media.
Estas recomendaciones apuntan a ayudar, bajar la ansiedad y a entender que lo que está pasando el alumno es un proceso natural que otras personas ya lo han vivido antes.
También, existen establecimientos educacionales que permiten que los más pequeños del hogar visiten la sala de clase y conozcan quién será su profesor anticipadamente (días previos), de manera de bajar el nivel de ansiedad y que el primer día de clases el niño ya reconozca ciertos patrones para facilitar el proceso de adaptación.
Por último, otros consejos de gran ayuda, independiente del nivel educativo, es incentivar el deporte durante el día, y controlar la cantidad de horas frente a un televisor, videojuegos o redes sociales, pues el objetivo para volver a la rutina con horarios regularizados, es buscar descansar.
Dicho esto, hacer el cambio de switch para volver de a poco a la rutina escolar antes que llegue marzo, y de la mejor manera posible, recae tanto en un trabajo personal como familiar. ¡En la unión esta la fuerza!
Conocer previamente el establecimiento, tener reuniones con el director o profesores y asistir con el menor de edad a la sala de clases, son parte de los consejos que recomiendan expertos a las familias que recién se están incorporando a un colegio nuevo o año escolar.