DESAFÍOS QUE CONVOCAN A TODOS LOS INVOLUCRADOS
El desafío para las instituciones formadoras de profesores es responder al desafío de una educación de calidad, generando programas que permitan la actualización de los conocimientos y el desarrollo de competencias que impacten en la calidad de las prácticas en el aula. El desafío para los establecimientos educacionales es promover la participación de sus directivos, docentes y equipos profesionales en instancias de formación continua. En tanto, el desafío para los profesores y profesionales es buscar su máximo desarrollo profesional, asumiendo el rol de líderes pedagógicos, que siempre tiene altas expectativas para sus alumnos y para sí mismos. “Nuestro compromiso como Escuela de Educación es desarrollar programas que aborden a la escuela en su totalidad y contribuyan verdaderamente a una educación de calidad en nuestro país”, dice Marilú Matte.