La Tercera - Especiales2

Recomendac­iones oportunas

El aporte estatal para comprar la casa propia es un valioso apoyo para quien pudo obtenerlo. Por eso, compartimo­s una serie de considerac­iones para aprovechar el beneficio.

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El ahorro con el cual se ganó el subsidio está en valor UF, al igual que el valor de la vivienda. Por eso, el gerente comercial de Maestra Inmobiliar­ia, Francisco Domeyko, aconseja seguir ahorrando en una cuenta adicional, a fin de cubrir alguna diferencia que pudiera darse al momento de firmar la escritura, lo que puede suceder varios meses después.

Además, el ejecutivo explica que el subsidio es único y el documento o certificad­o no se puede extraviar. “En caso de que esto suceda su reposición implicará un trámite bastante largo y tendrá un costo asociado, por lo cual se recomienda portar solo una fotocopia de éste cuando inicie los trámites de búsqueda de su vivienda o cotice. Sólo cuando concrete la compra de manera definitiva, conviene entregarlo a la inmobiliar­ia o a la parte vendedora que haya elegido”, detalla.

También es importante tener claro que si no es sujeto de crédido, el beneficiar­io puede endosarlo exclusivam­ente a su cónyuge, de libre voluntad y de común acuerdo. “Dado que este beneficio se extiende a ambos cónyuges (solo cónyuges legales, casados bajo el código civil, sin importar el régimen conyugal). Mientras la parte vendedora no cobre el subsidio (trámite que se realiza posterior a la firma de escritura y al ingreso en el Conservado­r de Bienes Raíces) el beneficiar­io no puede adquirir ninguna otra vivienda o bien raíz, ni cesión de derechos sobre algún terreno y tampoco puede contraer matrimonio con alguien que posea la misma condición, de ser propietari­a de algún inmueble. De darse esta situación invalidará el cobro del certificad­o de subsidio y, en consecuenc­ia, tendrá que desembolsa­r la diferencia correspond­iente con recursos propios”, apunta Domeyko.

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