Laboratorios clínicos
Avances e innovaciones para resultados precisos y confiables.
En nuestro país, los laboratorios clínicos han avanzado a la par con la tecnología a un ritmo bastante rápido, en el que predomina la automatización. Asimismo, se suma la robotización, que al automatizar los procesos contribuye a entrega resultados de mayor calidad, optimizando su utilidad clínica.
Guillermo Quiroga, académico de la Escuela de Tecnología Médica Universidad Diego Portales y director de la Sociedad Científica de Laboratorio Clínico de Tecnólogos Médicos de Chile, explica que es relevante considerar que la labor de los laboratorios clínicos no es solamente procesar una muestra, sino que abarca un espectro más amplio como es el ciclo del examen que consiste en tres fases. “La pri- mera fase preanalítica comienza con la solicitud del examen, la extracción de la muestra, transporte de ésta al laboratorio, recepción y preparativos para analizar. La segunda fase analítica consiste en el procesamiento de la muestra propiamente tal, es la más automatizada y va a la vanguardia con los cambios tecnológicos. La última etapa posanalítica tiene que ver con la entrega de los resultados en todas sus formas y plataformas para que, luego, los clínicos lo puedan interpretar y, en virtud de esa interpretación, emitir una nueva prueba o examen, comenzando así un nuevo ciclo del examen”, agrega.
En este ámbito, el académico plantea que los avances en los laboratorios van ligados a disminuir los errores de proceso y trabajar sobre ellos en torno a la mejora continua. “Es por eso que los procesos de acreditación de laboratorios clínicos son cruciales para garantizar el manejo de estos errores, beneficiando así a los pacientes”, puntualiza el experto.
Normativa y requisitos para la competencia
De acuerdo a la norma vigente en nuestro país, se establece que los requisitos generales para los laboratorios clínicos es la ISO 15189 (NCh-ISO 15189), la cual especifica los requisitos para el sistema de gestión y la competencia técnica de los laboratorios. “En términos generales, esta norma establece requisitos para el sistema de gestión, el control metrológico de los equipos que los laboratorios utilizan, y requisitos para demostrar la competencia técnica del personal que trabaja en un laboratorio clínico”, afirma Cristina Herrera, coordinador del Área Laboratorios División de Acreditación del Instituto Nacional de Normalización.
Es así como los laboratorios clínicos acreditados según la norma ISO 15189, pueden demostrar que tienen la competencia técnica para realizar los análisis que están acreditados. Además, la acreditación en esta norma permite demostrar que el laboratorio ha implementado las herramientas para analizar sus resultados y asegurar la validez de estos, añade Herrera.
En cuanto a la infraestructura, tecnología y equipamiento, la coordinadora del Área Laboratorios División de Normalización plantea que “cuando un laboratorio implementa y acredita la norma ISO 15189, cuenta con evidencia objetiva respecto de que su infraestructura, personal y equipamiento cumplen con los requisitos de la norma y se asegura su competencia para los análisis realizados”.