Fortalecidos con más proteínas
La industria láctea se ha destacado por incorporar alimentos funcionales, como leches y yogures enriquecidos con proteínas. Son para todos y especialmente para deportistas o personas que quieren tener una dieta con más proteína.
De acuerdo a cifras de Odepa, con antecedentes proporcionados por las plantas lecheras, a agosto de 2018 se habían producido en Chile 159.687.628 litros de yogur; 11.673.366 litros de leche cultivada o fermentada, y 271.505.520 litros de leche fluida, según se consigna en el Boletín de la Leche: Avance de Recepción y Producción de la Industria Láctea de octubre de 2018.
Estas cifras acompañan el desarrollo del mercado nacional. Por ello, actualmente, es posible encontrar diversos productos lácteos entre los que destacan alimentos funcionales, destacando en la industria láctea las leches y yogures enriquecidos con proteínas.
“El mercado de alimentos funcionales sigue en crecimiento. Dentro de los con mayor preferencia están los que apuntan a favorecer la digestión, en personas con alguna condición de salud que los necesite. En este sentido, alimentos con presencia de probióticos, libres de gluten y productos lácteos sin lactosa, forman parte de este segmento en crecimiento, que podría incluir más ingredientes y productos nuevos”, comenta Jessica Moya, nutricionista y académica de la Carrera de Nutrición de la Universidad San Sebastián.
Y los lácteos han sido el vehículo preferido para la suplementación y posterior desarrollo de alimentos funcionales, dada su alta aceptabilidad en la población. “Es por ello que naturalmente presentan un mayor nivel y calidad de proteínas que alimentos funcionales de origen vegetal. Se ha visto ahora, además de lácteos con adición de proteínas”, añade Moya.
De acuerdo con Maritza Medel, docente de la carrera Técnico en Calidad de Alimentos de Duoc UC Valparaíso, el porcentaje de proteínas que declaran ambos alimentos (leche y yogur) por porción es bastante similar, siendo levemente superior las de yogur.
Entre las más recientes innovaciones de la industria, ahora también hay lácteos con adición de proteínas.
Estos tienen propiedades saciadoras, lo que es muy favorable para quienes desean mantener una alimentación equilibrada, sin que esto signifique sumar calorías que no son necesarias. A ello, se agregan otros beneficios nutricionales adicionales y específicos.
¿Cuándo consumirlos?
“Estos alimentos enriquecidos en proteínas se recomiendan consumir en dietas para deportistas o con algunos requerimientos especiales, pero que sean guiados por un especialista y aquellas que tienen diariamente un bajo consumo de alimentos y que, por ende, deban complementar sus necesidades diarias de proteínas”, asegura la académica de Duoc UC Valparaíso.
También aconseja tener prudencia con el enriquecimiento de proteínas en la dieta. Para evitar un desbalance, los cambios como el alto consumo de proteínas en la alimentación deben estar guiados por profesionales. “En ocasiones interviene en la buena absorción del calcio y si en conjunto con altas cantidades de proteínas, se consumen altos niveles de carbohidratos o grasas, se puede propiciar enfermedades. Lo mejor es llevar una dieta equilibrada”, sostiene.
Para la nutricionista Jessica Moya, estos productos sirven para cuando el requerimiento de proteínas se ve aumentado y no es posible cubrir estas demandas con la alimentación habitual, “ya sea porque las cantidades de alimentos ingeridos no lo lograrían o se necesita aumentar sólo el aporte de proteínas y mantener la ingesta de otros nutrientes”.
Estos alimentos enriquecidos en proteínas se recomiendan consumir en dietas para deportistas”, por ejemplo. Maritza Medel, docente Duoc UC Valparaíso.