EEUU pide liberación del derrocado Presidente de Egipto, Mohamed Morsi
Desde el golpe del 3 de julio, y
Estados Unidos y Alemania han coincidido en pedir la liberación del depuesto Presidente egipcio, Mohamed Morsi, y el fin de las detenciones arbitrarias por parte de los militares en el poder desde el golpe de Estado del pasado 3 de julio. Morsi fue elegido hace un año en elecciones democráticas, después de las revueltas populares que habían terminado con tres décadas de gobierno de Hosni Mubarak.
El ministro de Relaciones Exteriores alemán, el liber a l G u i d o Wes t e r we l l e (FDP), dijo ayer en Berlín, a través de un vocero, que deben “evitarse las persecuciones políticas (y) las expresiones de justicia selectiva” en Egipto. Mientras, Estados Unidos pidió a los militares cesar las detenciones arbitrarias. Estas “entran en contradicción con la meta de lograr la reconciliación nacional” declarada por el gobierno provisional egipcio.
El Departamento de Estado de EE.UU. alertó de que “más detenciones y encarcelamientos políticos podrían dificultar una salida de esta crisis”. No obstante, Washington continuará con el suministro de armamento al Ejército egipcio. En agosto llegarán al país cuatro cazas de combate F-16.
Alemania demanda que el depuesto Morsi obtenga libertad de movimientos y también acceso a una “institución neutral”, como la Cruz Roja. Además, pidió a los Hermanos Musulmanes que renuncien a la violencia en sus protestas contra los militares. En una llamada a la moderación ante la escalada violenta de la última semana, Westerwelle señaló que “el regreso de la democracia a Egipto sólo se logrará si todas las fuerzas políticas pueden participar en el proceso de transición”. Desde el golpe de Estado han muerto ya más de 100 personas en los choques.
Morsi sigue bajo custodia militar y en paradero desconocido. Sus simpatizantes y otras fuerzas islamistas están llamando a las protestas multitudinarias en diversas ciudades egipcias, pero sobre todo en El Cairo ( ver re-