PURO ARTIFICIO
GALERIA Bech fue sitio relevante al conformarse una escena de arte contemporáneo en Santiago a fines de los años 90 y comienzos de los 2000. Abierta principalmente a artistas jóvenes, se conoció como un lugar de prueba que hoy ha perdido visibilidad. No obstante, aún es posible encontrar allí nombres que pronto circularán en espacios de arte emergente.
En Auténticamente kitsch, Andrea Spoerer y Luz Covarrubias dialogan desde la pintura y la escultura –respectivamente– proponiendo un juego de realidades donde nada es auténtico, sino simulaciones que apuntan a un concepto clave para ciertas tendencias de arte actual como es el kitsch, refiriéndose a ciertas dinámicas de la sociedad contemporánea.
Generalmente vinculado con el pastiche, el consumo y la baja cultura, el kitsch es esencialmente pretensión, aparentar cierto estilo o materialidad “noble” bajo estrategias de mal gusto, efectistas. Con una historia cultural marcada por las apropiaciones de estilos europeos y una globalización que hoy todo lo traspasa, se trata de una estética que puede ser muy chilena y que estas dos jóvenes artistas abordan a dad de tiempos y lugares que opera desde la superficie, desde la materialidad pura. Recordamos esas casonas llenas de adornos de porcelana y detalles afrancesados de cierta burguesía local o ese tiempo detenido de las escenas finales de 2001 Odisea en el Espacio, de Stanley Kubrick, donde el astronauta Dave Bowman vive en una habitación de hotel estilo Luis XVI que es, justamente, pura imitación y también una especie de cárcel.