Controlarán plaga con insectos españoles
Ni insecticidas ni plaguicidas. Promoviendo una solución más benigna con el medioambiente, el SAG atacará una plaga urbana en Santiago con un insecto importado. Por
MIDE siete milímetros, pero l i t e r a l mente es capaz de doblegar un árbol de 30 metros. La vaquita del olmo, un coleóptero similar a un escarabajo, es una plaga originaria de Europa, detectada por primera vez en Chile en 1994. Hoy está distribuida entre Valparaíso y La Araucanía, y ataca a los árboles urbanos y, particularmente, al olmo.
Aunque no llega a destruirlo, se alimenta de sus hojas (sólo deja la nervadura, la raíz de la hoja), perdiendo su capacidad de fotosíntesis, lo que afecta su crecimiento. Además, al perderse las hojas, disminuye su poder de brindar sombra.
Cuando llegó a Chile, la vaquita del olmo lo hizo sin su enemigo natural: el Tetrastichus gallerucae, un insecto parasitario que se come los huevos del coleóptero y, además, coloca sus propios huevos dentro de éstos, lo que interrumpe el ciclo de crecimiento de la plaga y termina con su eliminación.
Por eso, y para evitar el uso de pesticidas, un grupo de expertos del Servicio Agrícola y Ganadero (SAG) viajó este fin de semana a España en busca de unos mil huevos de vaquita del olmo ya infectados con el parásito.
La idea es traerlos a Santiago para mantenerlos en laboratorio y hacer proliferar el Tetrastichus gallerucae, para luego liberarlos en los árboles y destruir a la vaquita.
Una vez que el insecto ha cumplido su tarea, muere de manera natural, sin atacar otras especies ( ver infografía).