La visión de un planeta virgen según Sebastião Salgado
El fotógrafo culmina ocho años de viajes con Génesis, volumen que llega ahora a librerías locales.
Sebastião Salgado tuvo que registrar primero algunas de las escenas más duras de los Sin Tierra en Brasil, los trabajos forzados en Africa y la miseria de los pueblos nativos en América Latina, para que en estos últimos años su cámara diera un vuelco deliberado hacia la belleza natural del planeta.
Por primera vez, la mirada del brasileño, que se transformó en fotógrafo a tiempo completo en 1973, tras abandonar una exitosa carrera de economista en Inglaterra, se posa en los últimos lugares vírgenes del planeta para capturar aquellos desiertos, montañas, selvas y tribus que han eludido el avance de la modernidad. La nueva serie de Salgado se titula Génesis y es el resultado de una épica expedición de ocho años, conociendo, por ejemplo, las especies y volcanes de las Galápagos, el Atlántico Sur, la tribu de los Zo’e aislada en la selva amazónica, los iceberg de la Antártica y las escarpadas montañas del Gran Cañón.
Las instantáneas en blanco y negro se exhiben por partida doble, a través de un libro de 520 páginas, que llega a Chile, y una gran exposición en el Museo Nacional de Historia Natural de Londres: “Quiero mostrar el mosaico de la naturaleza en todo su esplendor. Alrededor del 46% de la Tierra permanece en el estado en que se hallaba en la época del Génesis. Debemos conservar lo existente”, afirma.
Lo bello y lo feo
En su odisea fotográfica, Salgado no ha estado solo. Desde hace décadas trabaja con Lélia Wanick, su esposa, quien dejó la arquitectura para ser curadora de su trabajo, levantando juntos Amazonas Images, su propia agencia de prensa.
Acostumbrado a cuestionar los modelos de trabajo humano, Salgado es sensible a aquellos movimientos sociales que piden una mejor calidad de vida. Entre sus obras más conocidas está una serie sobre los buscadores de oro en la mina en Serra Pelada, Brasil, los trabaj a dores de l o s c a mpos agrupados en el Movimien- to de los Sin Tierra y los efectos devastadores de la sequía en la región de Sahel, en Africa. En 2007 exhibió 30 años de trabajo en el continente negro.
Génesis resulta ser un alto en ese camino o más bien una vuelta de tuerca en el trabajo de Salgado: a través del registro de lugares inmaculados, el fotógrafo hace hincapié en el potencial destructivo del ser humano.
Tanto en el libro como en la exposición, hay fotografías a paisajes sorprendentes, casi bíblicos, como ban- cos de niebla que se forman en un río de Zambia o la majestad de un témpano blanco en el mar de Weddell.. También hay imágenes tribales como las del pueblo Mursi, que vive a lo largo del Valle del Olmo en Etiopía y que están siendo amenazados por una hidroeléctrica en construcción. “Estoy siempre comprometido con las organizaciones comunitarias. Tengo un deber moral con la gente que fotografío. Las personas ven mi máquina c o mo si fuera un micrófono”, ha dicho. Ed. Taschen, 520 págs. $ 47.840 en librería Contrapunto.